CASTELLÓ. El turismo rural en la provincia de Castellón ha registrado un octubre de 2025 especialmente positivo, consolidando la recuperación y expansión del sector. Según los datos de la Encuesta de Ocupación en Alojamientos de Turismo Rural publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE), tanto el número de visitantes como las pernoctaciones han experimentado incrementos significativos respecto a octubre de 2024, en un mes que tradicionalmente abre la temporada de otoño y que tiene en el puente del 9 y 12 de octubre su principal tractor.
En octubre de 2025, los alojamientos rurales de Castellón recibieron un total de 4.180 viajeros, frente a los 3.510 del año anterior, lo que supone un incremento del 19,1%. Este crecimiento se sustenta principalmente en el turismo nacional, que aumentó un 29,6%, mientras que la llegada de visitantes extranjeros descendió un 65,5%, hasta apenas 134 personas. El número de pernoctaciones totales alcanzó las 11.612, un 45% más que las 8.012 contabilizadas en octubre de 2024, debido a que los viajeros nacionales no solo fueron más numerosos, sino que prolongaron su estancia, compensando con creces la caída del turismo internacional.
El sector también amplió su capacidad alojativa durante el mes de octubre, con 349 establecimientos abiertos y 2.713 plazas, lo que supone aumentos del 10,8% y del 13,3%, respectivamente, respecto a octubre de 2024. El incremento de la oferta se acompañó de una mejora de la ocupación, con un grado de ocupación por plazas del 13,8%, un 27,9% superior al año anterior, un grado de ocupación por plazas en fin de semana del 31,94% y un grado de ocupación por habitaciones del 21,1%, ambos con incrementos superiores al 30% en términos relativos. Además, el personal empleado creció hasta 456 personas, un 7,3% más que en octubre de 2024, reflejando el mayor volumen de actividad del sector.
Fortaleza del mercado nacional
El balance del periodo enero–octubre confirma que el turismo rural en la provincia de Castellón mantiene en 2025 una evolución positiva, sostenida por la fortaleza del mercado nacional. Los viajeros residentes en España aumentan un 4,7%, hasta alcanzar los 34.308, mientras que las pernoctaciones crecen un 15,8% y suman 102.251 noches. Este incremento refleja una mayor fidelidad del visitante doméstico y estancias más prolongadas. En conjunto, el sector registra 36.905 viajeros (+1,3%) y 112.272 pernoctaciones (+3,8%), lo que consolida una tendencia al alza moderada pero estable respecto al año anterior.
En contraste, el mercado internacional muestra un retroceso significativo, con descensos del 28,9% en el número de viajeros y del 49,6% en las pernoctaciones entre enero y octubre. Esta caída reduce la diversificación del turismo rural, aunque queda ampliamente compensada por la solidez de la demanda nacional, que se convierte en el principal motor de crecimiento. El balance global revela, así, un 2025 más dependiente del visitante español pero también más sólido y con mejores resultados generales que en 2024.