CASTELLÓ. Cuando todo parecía que la senadora del PP por Castellón Salomé Pradas formaría parte de la mesa de la Cámara Alta, al ser uno de los nombres escogidos por la formación que lidera Pablo Casado, la representante popular finalmente se ha quedado fuera de este órgano una vez constituido ya que el PP solo contará con dos miembros en la mesa de los tres que inicialmente se barajaba a raíz de los contactos previos.

¿La razón?. La abstención del PP la semana pasada para la elección de Miquel Iceta como senador territorial de los socialistas -que era el paso previo a su posible designación como presidente del Senado- sentó muy mal en las filas socialistas que, incluso estaban dispuestos a ceder parte de su representación en la mesa con el fin de fomentar un escenario de diálogo. Finalmente, esto no será así y no apoyar al líder socialista catalán le ha supuesto al PP perder presencia en la mesa del Senado.

Al PSOE le corresponde cinco representantes en este órgano, mientras que el PP debe conformarse con los dos que normativamente le corresponde. Finalmente, los elegidos por el PP serán el hasta ahora presidente del Senado, Pío García Escudero, y el exportavoz parlamentario popular Rafael Hernando, con lo que Pradas queda fuera de las quinielas.

El PSOE, de los cinco representantes a los que tiene derecho, se ha quedado con cuatro puestos en la mesa, con Manuel Cruz, como presidente de la Cámara Alta; Cristina Narbona, como vicepresidenta; Fernando Martínez y Olivia Delgado, como secretarios; el quinto que le correspondía a los socialistas lo han cedido finalmente al Partido Nacionalista Vasco.

Así, en este baile de nombres la castellonense Salomé Pradas ha sido la más perjudicada al quedar fuera de los planes previos, que fruto de las negociaciones entre socialistas y populares.