CASTELLÓ. El Museu d’Etnologia de Castelló acoge hasta el 5 de mayo la particular denuncia contra el abandono del campo de Claudia de Vilafamés, una de las creadoras plásticas con más proyección en la provincia. ‘L’ànima del cep’ es el nombre de esta exposición en la que la pintora transforma en arte la belleza de la naturaleza muerta que llegó a su máxima expresión tras el encierro por la pandemia.
“La tierra estaba desatendida y estaba todo muerto. Pero fue en ese momento cuando me di cuenta de que las cepas que había en el suelo y que estaban totalmente desechas, tenían la forma perfecta para ser pintadas. Recogí una buena muestra y me las llevé al estudio, y cuando las puse frente a un fondo azul vi claro cuál era el camino”, explica.
Para Claudia se inició un proceso reflexivo cuyo eje es el abandono de la agricultura pasando por nuestras raíces y el proceso vital hasta llegar a la muerte. “Es una lástima la situación actual. Yo me centro en la imagen de la viña pero se traslada al campo en general. Es de donde comemos cada día, y aun así lo hemos dejado morir”.