VILA-REAL. El sector de la hostelería de Vila-real, agrupado en la recientemente constituida Associació d'Hostaleria i Ocio de Vila-real (ASHIOVI) no baja la guardia y ha vuelto a hacerse oír en protesta por las medidas impuestas por el Gobierno valenciano que ha llevado al cierre del sector, en una decisión que consideran "injusta", desproporcionada y "que lleva a la ruina a numerosas familias de la ciudad".
Por tercer miércoles consecutivo, un centenar de hosteleros se han concentrado en la plaza Mayor de Vila-real para manifestar su rechazo al cierre y a la falta de perspectivas de un sector que es clave para la economía y el comercio de la ciudad. Tras una concentración frente al Ayuntamiento y en presencia de las principales autoridades municipales, los empresarios y trabajadores del sector han protagonizado una cacerolada y una marcha que ha transitado por algunas de las principales calles y avenidas del centro.
Tras este itinerario, los representantes de Ashiovi han leído un manifiesto en el que se ponía énfasis en la situación injusta que les ha llevado la pandemia y, a consecuencia de ello, las medidas impuestas por el Consell. Los presentes mostraron su malestar por este cierre que a día de hoy no tiene fecha de caducidad.
Los hosteleros recuerdan en el escrito que llevan ya casi un año con severas restricciones que les han puesto en una situación agónica. En el manifiesto, en el que no olvidaron al sector del ocio nocturno, muy dañado en este tiempo, han remarcado que los cierres "se han mostrado ineficaces para frenar los contagios mientras que ha llevado la ruina a muchas familias".