CASTELLÓ. Es extraño que un mismo mural recorra cientos de kilómetros. Lo común es que lo haga el artista o la artista que hay detrás, pero siempre reproduciendo en las paredes una obra diferente. Esto se da, en parte, por la propia naturaleza del arte urbano. Un arte pensado para adaptarse a calles de distintas ciudades con diseños meditados y a la vez tan improvisados.
Cuando el colectivo de artistas Unlogic Crew fue seleccionado para dejar su mural 'La unión hace la fuerza', en el polideportivo del barrio de la Concepción de Madrid, también pensaban que sería así. Fue además, el propio Ayuntamiento quien les encargó crear un mural que representara valores de igualdad y diversidad en la ciudad. Para hacerlo posible, este grupo de profesoras de pintura y profesionales del diseño, optó por retratar 15 rostros femeninos que lucharon en su día por los derechos de la mujer. Entre ellas la poeta y rapera Gata Cattana o la Nobel de la Paz, Rigoberta Menchú se "dejaron ver" por la capital. Una simbólica visita que, sin embargo, duró apenas unas horas.
El mural, que todavía permanece en Madrid, fue cubierto con pintura uniforme, haciendo imposible el reconocimiento de los rostros que allí se encuentran. Pero además, en enero de 2021 el partido de Santiago Abascal pidió la retirada del mural por, a su juicio, "difundir un mensaje político y fomentar el discurso del odio". Una petición que no salió adelante, y que además, chocó con la respuesta vecinal. No solo apoyaron a las artistas y su creación, sino que además las alentaron a recrear este mismo mural en diferentes partes del país. Y es que no hay peor fracaso para alguien que decide acabar con una obra de arte, que ver que aquel dibujo -su mensaje y su significado- no solo no ha sido borrado sino que además se ha multiplicado.