CASTELLÓ. En un sector tan exigente y en constante evolución como el cerámico, pocas trayectorias destacan con la fuerza y la coherencia como la de Rogelio Vila Úbeda, fundador y presidente de Equipe Cerámicas, que a sus 75 años continúa siendo un referente para empresarios, técnicos y nuevas generaciones de profesionales.

Licenciado en Ciencias Químicas por la Universidad de Valencia, Rogelio Vila inició su recorrido en la industria en 1973, dando los primeros pasos en laboratorios especializados en pastas de porcelánico y fritas para esmaltes. Aquella etapa temprana, guiada por la curiosidad técnica y una enorme capacidad de aprendizaje, marcó el inicio de una carrera sólida y respetada.

Tras sus inicios en Cedonosa y Cedolesa asumió la Dirección Técnica de Inalco, una etapa decisiva: en la que profundizó en todas las áreas de la evolución del proceso cerámico: desde la fabricación de bizcocho y azulejos en bicocción a la implantación de la monococción porosa.

 Rogelio Vila supo convertir la experiencia en criterio, y el criterio en decisiones que dejaban huella en cada proyecto en el que participaba.

Tras años de crecimiento profesional, dio un paso natural: emprender. Participó en la creación de Estudio Cerámico, Keramia, Tencer y, finalmente, Equipe Cerámicas, siempre aportando una visión técnica rigurosa y una forma de trabajar orientada a mejorar, avanzar y perfeccionar.

 Su compromiso no se ha limitado nunca a la dirección: su presencia cercana en las plantas, su atención a los detalles y su implicación diaria forman parte de su sello profesional.

 Quienes trabajan a su lado destacan su energía, su capacidad para observar y detectar mejoras, y su compromiso incansable con el sector. Incluso hoy, sigue recorriendo las líneas de producción, proponiendo ideas y aportando su experiencia con la misma ilusión que cuando comenzó.

 Es un trabajador incansable, un defensor de las necesidades del sector y un profesional que ha dedicado su vida a contribuir al desarrollo de la industria cerámica

Desde 2012, centra su actividad en Equipe Cerámicas, la empresa donde ha consolidado un proyecto empresarial que hoy es referente nacional e internacional. Bajo su liderazgo, la compañía ha pasado de 60 empleados y 6 millones de euros de facturación anual, y ha superado los 100 millones y ha alcanzado los 400 trabajadores en 2025, un crecimiento que refleja visión, esfuerzo y una cultura de mejora constante.

Un reconocimiento a toda una vida de dedicación

El pasado viernes, durante la cena de gala de la Asociación Española de Técnicos Cerámicos (ATC), Rogelio Vila Úbeda recibió la Insignia de Oro, uno de los reconocimientos más destacados del sector. Un homenaje a su trayectoria, su aportación técnica y su compromiso constante con la industria cerámica de Castellón y de España.

Este galardón supone una distinción especialmente significativa para Equipe Cerámicas, ya que reconoce no solo el recorrido profesional de su fundador, sino también su influencia en la formación de equipos, en la innovación industrial y en el crecimiento del tejido cerámico de la provincia.

Una figura imprescindible para entender el presente del sector

Hoy, la historia de Equipe Cerámicas —y buena parte del desarrollo del sector— no puede entenderse sin la figura de Rogelio Vila Úbeda. Su trayectoria es un ejemplo de dedicación, liderazgo y pasión por un oficio al que ha entregado toda su vida, y cuya evolución continúa impulsando con el mismo entusiasmo que el primer día.