CASTELLÓ. El azulejo ha puesto en marcha la negociación del nuevo convenio laboral con la constitución, este lunes, de la mesa de diálogo entre Ascer (la patronal cerámica) y los sindicatos CCOO y UGT. El sector retoma así el diálogo social tras haber pactado el actual marco el pasado mes de julio, y lo hace con el objetivo de acordar un convenio de mayor duración que el vigente, que solo tuvo un año de validez. En aquella ocasión, la patronal solicitó un periodo corto a la espera de la tramitación del anteproyecto de ley de reducción de la jornada laboral a 37,5 horas semanales.

Dicha propuesta cayó en el Congreso al no contar el Gobierno con los apoyos necesarios, lo que abre la puerta a que el nuevo acuerdo tenga una vigencia mínima de tres años, el periodo habitual en este tipo de convenios.

Ambas partes acordaron este lunes celebrar la primera reunión el próximo 28 de octubre. Previamente, este viernes, los sindicatos abordarán con sus bases las reivindicaciones que llevarán a la mesa.  Fuentes sindicales confían en conseguir esta vez un acuerdo rápido. En la anterior ocasión se fraguó in extremis, con amenaza con huelga por parte de las organizaciones de trabajadores. 

Sector en crecimiento pero con ralentización en los últimos meses

El diálogo social se reanuda en un contexto en el que la industria azulejera trata de adaptarse a las nuevas reglas del comercio internacional marcadas por las políticas de Donald Trump. Desde Ascer han pedido prudencia en la negociación por "la gran incertidumbre comercial influida por la actual situación geopolítica, con un contexto de ligero crecimiento en la producción, aunque en el último trimestre se vienen produciendo reducciones consecutivas de la producción y del empleo". Según los últimos datos oficiales, la producción encadena tres meses consecutivos de caídas, mientras que el auge de las exportaciones se ha frenado este verano. Por su parte, el empleo ha descendido en alrededor de un centenar de personas en los dos últimos meses, según la estadística de la Seguridad Social. No obstante, la industria mantiene un balance positivo en el acumulado productivo del año gracias en parte al empuje de las ventas en el mercado doméstico, y las plantillas cuentan con 300 trabajadores más que en enero. 

El nuevo convenio afectará a 14.261 personas. En mayo, Ascer y los sindicatos pactaron el actual acuerdo, que contemplaba una subida salarial del 3% en 2025, con una revisión adicional del 1% si el IPC supera ese valor en diciembre. Este ajuste se aplicaría el 1 de enero de 2026.

El convenio también incorporó las medidas previstas en el Real Decreto que refuerza la igualdad y no discriminación de las personas LGTBI en las empresas, de aplicación obligatoria para aquellas con más de 50 trabajadores. Asimismo, en materia de licencias y permisos, se estableció que, en los casos de fallecimiento de familiares o hospitalización, el inicio del disfrute del permiso se producirá en el primer día laborable siguiente, conforme al calendario de cada persona trabajadora. Con ello, se incorpora la reciente jurisprudencia unificada en esta materia.