CASTELLÓN. Cuatro comedias y tres dramas de contenido social –con el horror que viven las personas refugiadas, el racismo y la compleja relación entre padres e hijos como telón de fondo- salpican la parrilla ‘culpable’ de la tercera sesión de proyecciones del Festival Internacional de Curtmetratges de Vila-real, Cineculpable 2018. La cita alcanza así este miércoles el ecuador de su Sección Oficial y pone la mirada ya en la gala de entrega de premios del viernes 30 de noviembre. 17.800 euros en galardones que se sucederán a ritmo de swing en una velada presentada por las humoristas Arantxa González i Xel Curiel y que contará con el padrino de esta 21ª edición, el actor toledano Federico Aguado.
Si por algo destaca también este tercer cara a cara con el cortometraje que propone el festival es por su carácter internacional. Este miércoles (22.00 horas, Auditori de Vila-real), se podrán ver otros dos de los cinco cortos internacionales seleccionados este año, procedentes de Turquía y Francia. La vertiente de reflexión y crítica social la pondrán tres películas. Pas d’Ici, del francés Bellaiche Nicolas, abrirá los pases con un drama sobre derechos humanos, familia, mujer, minorías étnicas, racismo y religión. Con 15 premios y selecciones en festivales, el film narra la historia de Samia, una joven argelina que acaba de llegar a Francia y que encuentra un trabajo junto a Yves Marchand, un hombre "amargado" de una pequeña y remota aldea del Luberon.
Al tridente dramático se suma el cortometraje bélico Mama (España/Turquía), bajo la dirección de Eduardo Vieitez, quien fija su mirada en una niña refugiada siria que cruzó esa delgada línea que separa el cielo del infierno. El corto se presenta como una oportunidad de vivir en primera persona lo que una persona refugiada siente en ese éxodo, y lo que encuentra cuando aterriza en su ‘nueva vida’.
Sobre la compleja relación entre un hijo y su padre enfermo se construye la historia de ficción Queridísimo Papá, bajo la realización de Luis Navarrete y que suma ya 19 premios y selecciones en festivales. La otra cara de la noche llega de la mano de cuatro comedias que bucean a su vez en géneros de lo más dispares. El círculo lo hace sobre la fantasía y el thriller. Daniel González (Barcelona), dirige esta historia, que protagoniza David, quien acaba de mudarse a su nuevo piso y recibe la inesperada visita de unos vecinos.
Cinco plazas, la ópera prima del también barcelonés Víctor Urbano, y Glitch (Marcos Cabotá, Baleares), que aborda la frustrada cena navideña de Nacho con su familia, añadirán otra buena dosis de risas a la noche. El podio cómico lo cierra Cariños, del madrileño Pedro Moreno del Oso, una historia sobre relaciones personales que protagoniza la actriz ilicitana Elisa Lledó (Allí abajo); y Rodrigo Saenz De Heredia, y que sucede en un tórrido día verano, cuando una pareja habla sobre el futuro de sus hijas y propone un juego comprometido. Cariños acumula 9 premios y selecciones en festivales.