Clientes de las tascas, en los veladores autorizados por el Ayuntamiento. Foto: ANTONIO PRADASCASTELLÓ. El Ayuntamiento de Castelló defiende la legalidad de las evaluaciones efectuadas por los funcionarios durante los últimos años en las tascas y considera inverosímil que "el atajo legal" que plantean los empresarios permita anular las restricciones de la Zona Acústicamente Saturada.
Según asegura el concejal de Transición Ecológica, Fernando Navarro, "todos los informes técnicos municipales avalan la gestión del seguimiento de la ZAS que hemos venido realizando". Ergo, califica de "muy improbable salir de la misma por un atajo legal", subraya.
No obstante, el regidor asume la contingencia de que los hosteleros puedan tener razón en su argumentación, siempre y cuando el departamento legal acredite irregularidades en el proceso de mediciones. "Si la asociación de las tascas nos formula un argumento jurídico nuevo, el martes ya nos comprometimos a estudiarlo y responder jurídica y políticamente", aludiendo a la posibilidad de eliminar las actuales prohibiciones en la plaza Santa Clara y calles Barracas e Isaac Peral acerca del consumo de alcohol en la vía pública.
Navarro insiste en que "nuestro compromiso tiene que ser salir de la ZAS y declarar las tascas como zona gastronómica". Es decir, "cuando tengamos evidencias de que el ruido se ha reducido y cuando encontramos un punto de convivencia entre el vecindario, los propietarios y la ciudadanía, en general, que nos pueda permitir tener un acuerdo que evite que la causa vuelva a los tribunales", advierte.
Como consecuencia del acatamiento de la sentencia del TSJCV, el Ayuntamiento de Castelló ha tenido que cambiar el contenido del artículo 26 de la ordenanza sobre Convivencia Ciudadana. Ante esa modificación y en virtud de la concesión que otorga la figura del velador para beber en la calle, los tasqueros han disparado las solicitudes de autorización para instalar lo que se conoce como 'mesitas de un solo pie' y que permite el consumo de alcohol. Hasta el momento, se han aprobado 38 licencias, todas en la calle Barracas, tal cual apuntan fuentes municipales.
Los veladores se irán colocando de manera progresiva, dejando en todo momento un hueco en el centro para permitir el paso de los clientes, algo que la plataforma Sense Soroll pone en duda ante la aglomeración que se produce en la zona de jueves a sábado.
Los empresarios de las tascas están decididos a llegar hasta el final para defender no solo sus negocios, sino también la singularidad de un espacio que se ha convertido en reclamo turístico para Castelló. En este contexto, mantienen la convocatoria del 8 de noviembre con vistas a realizar una protesta pacífica, justo a escasos dos días de la celebración de las elecciones generales.
