El buen ritmo de las obras del centro de mayores de Benicàssim permitirá abrirlo en julio

CASTELLÓN. La alcaldesa de Benicàssim, Susana Marqués, ha visitado este jueves las obras de construcción del nuevo centro de atención de mayores que se está construyendo entre la calle Estatut y Maestro José Segarra, según han informado fuentes municipales a través de un comunicado. Sobre el terreno, Marqués ha avanzado que "las obras se están desarrollando a buen ritmo. Ahora lo que nos gustaría al equipo de gobierno es que los pliegos del concurso de gestión del centro, se redactarán y pudiéramos tenerlos listos a la conclusión de la obra para que el funcionamiento del mismo sea lo antes posible".

Según el comunicado municipal en Benicàssim, los mayores de la localidad han tenido siempre como centros de referencia para sus necesidades de ocio, salud y actividades, los espacios del ayuntamiento y el centro de salud, pero un CEAM es una instalación que va más allá, ya que contará con un servicio de centro de día para personas con un cierto grado de dependencia, con actividades de desarrollo cognitivo, mejora de la psicomotricidad, la memoria o la estimulación sensorial. Pero además, tendrá servicios básicos de medicina preventiva y especializada para gente mayor.

Según indica la alcaldesa, "nuestra voluntad, ha señalado la alcaldesa, es que los más de 3.000 mayores de nuestra ciudad, cuenten con todos los recursos para afrontar esta nueva etapa de sus vidas con programas de envejecimiento activo, con atenciones sociales, psicológicas y médicas especializadas a su edad y con todos los servicios que necesiten. Nuestros mayores son los que han trabajado toda su vida por nosotros y ahora, la sociedad debe devolverles ese servicio haciéndoles participes de los mejores recursos y de mayor calidad", según indica Marqués.

Las obras del CEAM se retomaron en abril de 2017, tras más de seis años de paralización, los tres últimos, por retrasos en la licitación de la nueva dirección de obra. La inversión en la ejecución del centro asciende a casi 1,7 millones de euros, financiados por la Generalitat y la obra está prevista que acabe en julio de 2019.