CASTELLÓ. El Castellón ha pasado en unas semanas de ser un equipo débil a domicilio a convertirse en uno de los más potentes visitantes del grupo 2 de Primera RFEF.
Los albinegros solo fueron capaces de totalizar un punto en sus tres primeras salidas, pero la situación ha dado un vuelco en los dos últimos desplazamientos, frente a UCAM Murcia y San Fernando, con un pleno de victorias.
Este registro sitúa a los de Sergi Escobar como el cuarto mejor equipo de la competición lejos de su feudo. Los siete puntos que ha conseguido solo quedan superados por los diez que han sumado Villarreal B y Algeciras y los ocho de Atlético Baleares, que es el próximo equipo que visitará a los albinegros, este fin de semana.
Además, la reacción del Castellón fuera de casa ha sido determinante en su mejoría clasificatoria, ya que ahora se encuentra a solo dos puntos de los puestos de play off, cuando hace apenas cuatro jornadas estaba en puestos de descenso.
El cambio de tendencia se inició en la recta final del partido ante el Cornellà, gracias a un gol de Yac Diori que evitó la tercera derrota consecutiva de los orelluts. Ese primer punto dio paso a una racha en la que se evidenció una mejoría defensiva del conjunto de la Plana. Desde esa base, el Castellón construyó sus victorias ante UCAM Murcia y San Fernando en partidos que destacaron por la igualdad, así como por una alta efectividad de los albinegros de cara a gol.
Así las cosas, el equipo de Sergi Escobar ha sumado los mismos puntos en Castalia que a domicilio. Como local ha sumado victorias frente a Sevilla Atlético y Barcelona B y ha igualado ante el Nàstic de Tarragona. Solo ha perdido frente al Atlético Sanluqueño. Fuera de casa, los albinegros han jugado un partido más y cuentan con dos derrotas, cosechadas en sus primeros desplazamientos, en Albacete y La Línea de la Concepción.
Pero los últimos resultados a domicilio del Castellón suponen mucho más que un registro estadístico. Porque confirman su capacidad competitiva en escenarios muy distintos a Castalia. Sobre todo en su última salida, en San Fernando, donde supo sacar rendimiento a un partido poco fluido y en un campo en malas condiciones, sin disponer además de varios jugadores fundamentales en sus esquemas.