El clúster azulejero se resigna: Cersaie era un gasto inútil más que una pérdida de ingresos su ausencia

CASTELLÓ. El clúster cerámico se resigna a la cancelación de Cevisama. De hecho, ninguna de las tres patronales castellonenses se ha mostrado demasiado afectada por la adversidad de que en este 2020 no se vaya a celebrar "una feria tan importante para la industria", como reconoce Ascer. En este sentido, aunque desde la patronal azulejera lamentan la decisión, también la califican de "responsable". 

No en vano, la celebración de la feria era vista por el sector como un gasto inútil, dado que se consideraba que serían muy pocos los visitantes, mientras el coste de participación (que para muchos fabricantes puede rondar los 300.000 euros en total, incluidos los gastos de viaje y pernoctación de sus trabajadores) seguía siendo elevado. De ahí que en Ascer comprendan "que la situación obligue a tomar esta dura decisión".

También desde la patronal hermana de las fritas y esmaltes se muestran comprensivos y sus dirigentes aseguran que la medida es "oportuna". Y es que, sin una vacuna, indican desde Anffecc, "hay que tomar todas las precauciones posibles para evitar posibles rebrotes". En cuanto al impacto en las cuentas de resultados de las empresas, las esmalteras señalan que la decisión "no beneficia a los intereses empresariales", pero no esconden que, de haberse celebrado, "la afluencia de público hubiera sido una incógnita, por lo que pensamos que la decisión es apropiada". 

Año de pocas novedades

A todo esto se suma el hecho de que este año estaba previsto que las factorías presentasen pocas novedades de producto, que suelen alternar; a lo que se añade que las innovaciones presentadas en Cevisama todavía no han podido ser mostradas a los clientes debido a la incidencia del coronavirus. 

A pesar de esto, desde Ascer no esconden su deseo de que se puedan retomar "cuanto antes las actividades comerciales y promocionales tan importantes para el azulejo, no solo para el español sino para las industrias de todo el mundo". Y es que, en este contexto, se relanzará el impulso que cada año viene experimentando la promoción personalizada en detrimento en muchos casos de las ferias. 

La maquinaria, en una diatriba

En lo que respecta a la maquinaria cerámica, la cancelación de Cersaie tampoco supone ningún golpe desmesurado. De hecho, el presidente de la patronal Asebec, Juan Vicente Bono, apunta que las industrias castellonenses "ya no teníamos previsto viajar a Bolonia", toda vez que la feria propia, Tecnargilla, ya anunció en mayo su cancelación. 

Eso sí, la supresión de la edición 2020 de Cersaie puede suponer un problema para la maquinaria. Y es que, hasta ahora, los eventos bienales que celebra en València y Rímini el sector van a ver modificado su calendario. Esto puede hacer que, en el caso de celebrarse Cevisama el año próximo, en Asebec valoren ubicar ya el pabellón tecnológico que han planteado junto a Anffecc. En caso contrario, las novedades de maquinaria castellonense previstas para 2022 llegarían tan solo cuatro meses después de Tecnargilla 2021. Y esto es un aspecto que siempre tratan de evitar.