CASTELLÓ. Visto bueno ambiental... pero con condiciones. La Generalitat Valenciana ha dado luz verde al Plan Especial del aeropuerto de Castellón para su nueva Zona de Actuaciones Complementarias (ZAC) con un informe ambiental y territorial estratégico favorable al considerar que los cambios urbanísticos previstos para el nuevo nodo industrial y logístico no tienen "efectos significativos en el medio ambiente". Ahora bien, antes de materializar el proyecto, el aeropuerto deberá hacer algunos estudios previos.
Y es que, más allá del bajo impacto de este proyecto tanto en la biodiversidad, el paisaje y otras estructuras medioambientales, el informe ambiental en el que se recogen numerosos informes de diferentes departamentos de la Generalitat Valenciana considera que sí hay "algunas afecciones o falta de justificación" en algunos apartados como el de la movilidad, el tráfico y el de la contaminación acústica. Deficiencias, que, señala, "pueden ser solventadas en fases posteriores de la tramitación urbanística" y "previamente a su aprobación definitiva".
El Plan Especial, que afecta a 545 hectáreas de terrenos de los términos municipales de Benlloc (117 hectáreas) y Vilanova d'Alcolea (428 hectáreas), supone fijar la ordenación urbanística necesaria para llevar a cabo, más adelante, las obras de urbanización y construcción del mencionado hub empresarial y así "permitir el asentamiento de nuevas actividades económicas compatibles con la actividad aeroportuaria", según reza el informe, que señala los condicionantes que se deberán cumplir antes de que el nodo se haga realidad.
Así, por ejemplo, en el ámbito de las infraestructuras viarias, el Plan recoge una nueva conexión por carretera del aeropuerto de Castellón con la CV-13. Pero no incluye ningún estudio de tráfico que sustente este cambio en función del aumento de los desplazamientos que supondrá la ZAC. "Deberá realizarse un estudio de tráfico, considerando la situación actual y futura, en el que se considere el incremento de tráfico generado por los usos definidos en el plan especial", subraya la Generalitat Valenciana en este sentido, para añadir que "la remodelación del enlace deberá ser coherente con el estudio de tráfico que se realice y, además, deberá estudiarse la necesidad de ampliación de las rotondas si fuera necesario, aparte de los nuevos ramales".
Por su parte, el Servicio de Movilidad también señala que "el Aeropuerto de Castellón es una infraestructura de transporte que presta un servicio público de carácter supramunicipal indiscutible en la Comunitat Valenciana" y que, por eso, el Plan Especial "requiere de la aprobación de un plan de movilidad". Un plan del que "no consta existencia", señala la administración autonómica, que insiste en que "visto que la instalación tiene carácter de servicio público, y que creará más de 250 puestos de trabajo en el año horizonte, no redactar dicho plan incumpliaría el objetivo de seguridad jurídica, que es uno de los principales objetivos planteados por el plan especial". El plan de movilidad deberá someterse a aprobación de la Dirección General de Obras Públicas, Transportes y Movilidad, previamente a la aprobación del plan especial.
En cuanto a la afección acústica, el informe emitido por la Dirección Territorial de Medio Ambiente de Castellón constató también que, entre la documentación presentada no consta estudio acústico. "Si bien es cierto que existen referencias a la problemática del ruido", señala el departamento autonómico, "sin embargo los aspectos detallados en esta documentación no tienen la entidad suficiente como para fundamentar un informe sobre la contaminación acústica inducida por el Plan". Por lo que el informe ambiental insiste en que "antes de la aprobación definitiva" del Plan, se deberá elaborar este estudio acústico, que será informado por la Dirección Territorial de esta Conselleria, adoptándose las medidas correctoras que indique.
La ZAC, impulsada por Aerocas y la Generalitat Valenciana, supondrá el desarrollo de suelo industrial y logístico para albergar hasta unas 30 empresas, como publicó Castellón Plaza en su momento. Según los trabajos realizados, habrá dos tipos de parcelas: unas para actividad puramente industrial con una superficie mínima de 10.000 metros cuadrados cada una, y otras para un uso mixto logístico-industrial, que también superarán los 10.000 metros cuadrados excepto aquellas que se dediquen a centros empresariales y de servicios, que podrán ser más pequeñas -5.000 m2 como mínimo-. En total, supondrá unos 635.000 metros cuadrados de suelo industrial y logístico.
Hace un año, Aerocas adjudicó la redacción del anteproyecto de urbanización de todo el ámbito de la ZAC, que abarca una superficie de más de un millón de metros cuadrados, y los proyectos de urbanización para dos fases diferenciadas, incluyendo elementos como los nuevos accesos y viales interiores, movimientos de tierras o implantación de servicios.
Aerocas, por su parte, ya dispone del suelo para comenzar a materializar la zona logística después de que la Generalitat Valenciana aceptara este verano la cesión del suelo del recinto, hasta ese momento propiedad de la Diputación provincial. De manera que, pasado este tiempo, y con el proyecto finalizado, el Consell debe iniciar los trámites para adjudicar las obras de urbanización de la primera fase, cuyo presupuesto asciende a 34 millones más IVA.