Foto: AYUNTAMIENTO DE CASTELLÓCASTELLÓ (EP). El pleno del Ayuntamiento de Castelló ha aprobado este jueves una declaración institucional conjunta de todos los grupos municipales para solicitar la paralización del proyecto de planta solar fotovoltaica denominado Magda que afectaría a varios municipios de la provincia de Castellón.
Así mismo, el pleno, que ha comenzado con dos minutos de silencio por la víctimas de la covid-19, ha dado el visto bueno a otra declaración institucional también conjunta de condena del Ayuntamiento de Castelló a la agresión de la Federación Rusa en Ucrania.
Además, se ha aprobado de forma inicial el Plan Local de Residuos del municipio de Castelló; y se ha rechazado una moción del Grupo Popular en la que pedía crear un plan antiokupación ilegal de viviendas. En este último punto, la concejala de Vivienda, María Jesús Garrido, ha señalado que la única pretensión de la moción popular era la "alarma social".
En el turno de ruegos y preguntas, la concejala del PP Susana Fabregat ha preguntado por el uso que, como sede de investigación, se le dará al edificio que hasta ayer acogía el servicio de Correos en Castelló, y ha señalado que los castellonenses "van a perder para su uso y disfrute un edificio emblemático".
La alcaldesa, Amparo Marco, ha recordado que se trata de un inmueble que ha comprado la Generalitat Valenciana, por lo que -ha dicho- "la pregunta del uso o no uso tendrá que trasladarla a sus compañeros en les Corts y que pregunten al presidente de la Generalitat lo que va a hacer allí o no va a hacer, y no aquí en el Ayuntamiento porque no es propiedad municipal".
Del mismo modo, ha indicado que le ha trasladado en dos ocasiones al presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, que creía que "lo mejor para ese edificio no era justamente el uso que pensaba hacer la Generalitat, pero como es propiedad de la Generalitat, tendrá que ser la Generalitat la que decida sobre el inmueble".
"Yo he trasladado que creía que era mejor que fuera una biblioteca o cualquier otro espacio para la ciudadanía de Castelló, pero cada uno con sus inmuebles hace lo que considera a pesar de que nosotros no estemos de acuerdo, igual que el señor presidente de la Generalitat no tendrá que decir a este Ayuntamiento lo que queremos hacer o no con los inmuebles municipales", ha concluido Marco.
