CASTELLÓ. El Acord de Fadrell está cada vez más cerca de sellar la nueva Relación de Puestos de Trabajo (RPT) en el Ayuntamiento de Castelló. Los tres partidos del ejecutivo local (PSPV, Compromís y Podem-EUPV) encaran la recta final de la negociación. Tanto es así que la confluencia acepta la propuesta del principal socio de gobierno para liberar el camino del presupuesto 2020.
La RPT de los dos próximos años contempla la creación de una plaza de ingeniero agrónomo para Transición Ecológica. El "gesto" convence a la convergencia, ya que se interpreta como el primer paso para dotar a la Concejalía de una unidad administrativa, algo que viene reclamando su titular, Fernando Navarro, desde el inicio de la legislatura.
La aquiescencia de Podem-EUPV a la propuesta del PSPV cierra la polémica y permite afrontar la tramitación de las cuentas municipales sin fisuras internas. La previsión del equipo de gobierno pasa por culminar el proceso reglado de aprobación a finales de julio, siempre en el peor de los escenarios. Todo hace indicar que la próxima semana (a más tardar la siguiente) la Junta de Gobierno Local validará el borrador. A continuación, se dará cuenta en comisión plenaria como antesala al periodo de alegaciones para que el PP, Ciudadanos y Vox puedan presentar sus enmiendas.
Una vez concluida esta fase, habrá una segunda comisión plenaria en la que se dictaminarán la estimación o no de las correcciones propuestas por la oposición. El documento final se elevará a pleno para su aceptación por la corporación.
Esa sesión, presumiblemente extraordinaria, cargará la agenda política del próximo mes, aunque dependerá del hipotético adelanto de la convocatoria ordinaria de agosto, inhábil y sin actividad parlamentaria en el consistorio. En este caso también entra dentro de lo posible que el tripartito opte finalmente por retrasar la cita a septiembre, como ocurrió en 2019.
Para entonces, la nueva RPT será una realidad, dando cumplimiento a uno de los compromisos adquiridos en las conversaciones previas para establecer el organigrama del gobierno. En ese tira y afloja de los tres grupos acerca del reparto de competencias se convino asignar personal a Sostenibilidad y Lucha contra el Cambio Climático, una de las cinco grandes áreas de la estructura municipal. Y, más concretamente, a Transición Ecológica, dependiente de Podem-EUPV.
La adaptación a la organización del tripartito se abordó en varios momentos del arranque del mandato. Sin embargo, el desacord, primero, y la covid-19, después, dejaron en stand-by el reajuste, hasta que la confluencia lo volvió a poner encima de la mesa, aprovechando la negociación para rediseñar el presupuesto 2020 por la pandemia. A partir de ese instante, el ejecutivo priorizó la revisión de la Relación de Puestos de Trabajo.
El Ayuntamiento de Castelló cuenta en la actualidad con cerca de 1.500 funcionarios. Entre los negociados más armados, destacan Urbanismo, Infraestructuras o Contabilidad, esenciales para la correcta gestión administrativa.