CASTELLÓ. El Castellón inicia este sábado una nueva etapa de su historia con su regreso al futbol profesional tras diez años de ausencia en esos niveles. Será en el Estadio El Toralín, frente a la Ponferradina, en el partido que abrirá la temporada 2020/21 en la Liga Smartbank, a las 16:00 horas.
El conjunto orellut retoma así un lugar en la segunda categoría tras su última presencia, en aquel lejano 19 de junio de 2010, cuando la grada de Castalia vio por última vez a su equipo en esa división. Desde aquel día en que los albinegros se despidieron del fútbol profesional cayendo ante el Córdoba por 0-1, una sucesión de desgracias causadas por dirigentes despiadados y sin escrúpulos provocó la era más negra de la historia de la institución y estuvo a punto de provocar su disolución.
Sin embargo, el Castellón sobrevivió de forma extraordinaria a todos los golpes y ahora inicia un recorrido ilusionante por el que ha sido su lugar más común, integrando de nuevo un sitio entre los clubes de la Liga de Fútbol Profesional (LFP).
El equipo de Óscar Cano ha realizado diez incorporaciones hasta el momento para afrontar el reto de competir en la Liga Smartbank, lo que supone cambiar prácticamente la mitad de la plantilla. Sin embargo, en este primer partido liguero se espera que el once sea parecido al de la pasada campaña y que los recién fichados se ganen su presencia gradualmente, ya que algunos de ellos llevan pocos entrenamientos con los albinegros.
Para muchos jugadores será un momento importante en sus carreras, ya que podrán cumplir su sueño de debutar en Segunda División. En esa situación se encuentran varios de los artífices del ascenso, como Campos, Muguruza, Lapeña, Carles Salvador, Rubén Díez, Jorge Fernández y David Cubillas, así como algunos de los recién llegados, como Guillem Jaime, Iago Indias, Álvaro Fidalgo y Jesús Carrillo.
Enfrente tendrán la oposición de un rival que vivió un momento parecido la pasada temporada, cuando logró retornar a Segunda División. La Ponferradina consiguió la salvación a falta de una jornada y este año busca el mismo objetivo. De momento, el conjunto berciano ha realizado 13 incorporaciones, que serán más, según su técnico Jon Pérez Bolo, lo que supone un cambio de cara importante respecto al pasado curso.
Para este choque, el Castellón no podrá contar con el concurso de uno de sus fichajes, Paolo Fernandes, que aún no se encuentra al mismo nivel de trabajo que sus compañeros. Tampoco estará Paco Regalón, lesionado de larga duración. El resto de la plantilla estará incluida en la expedición que se desplazará este mismo sábado a León en vuelo chárter desde el Aeropuerto de Castellón, a excepción de Jairo Cárcaba, Iñigo Muñoz y Alfredo Gutiérrez, que no cuentan en los planes de Cano y que podrían salir del club antes del cierre del mercado.
La Ponferradina afronta el partido con algunas dudas en la línea defensiva, ya que dos de sus refuerzos, Alex Pascanu y José María Amo, apenas han podido trabajar de cara al choque de este sábado. El rumano ha realizado un solo entrenamiento tras retrasarse su llegada al equipo berciano, mientras que el sevillano se acaba de recuperar de unas molestias físicas.