VALÈNCIA. La escalada del precio de la electricidad, más agudizada desde la invasión rusa, ha llevado a empresas y consumidores a decantarse por el autoconsumo de energías renovables para minimizar el impacto en su factura de la luz. Una alternativa que empezó a crecer a finales del pasado año, cuando el mercado mayorista de la electricidad empezó la senda alcista, y que ha acabado de despegar en los primeros meses de este 2022.
De hecho, en los últimos seis meses las instalaciones de autoconsumo se han disparado en la Comunitat Valenciana. Tanto es así que solo entre el último trimestre de 2021 y los primeros tres meses de lo que llevamos de año se han levantado casi la mitad de todas las instalaciones de autoconsumo que hay actualmente en tierras valencianas. Y todo parece indicar que la curva seguirá subiendo.
Así consta en un informe elaborado por la Dirección General de Industria de la Conselleria de Economía, en el que se analiza la situación del autoconsumo en la región hasta el 31 de marzo de este año. Un documento que refleja que, desde 2019 y hasta el primer trimestre de este año. en la autonomía hay 20.671 instalaciones, de las que el 44,4%, es decir, 9.191 se montaron en los últimos seis meses.
El 'boom' del autoconsumo vino provocado por la decisión del Gobierno de Pedro Sánchez de eliminar el llamado ‘impuesto del sol’ en 2019 y, desde entonces, se ha disparado el interés por las instalaciones verdes. Un auge que también han detectado las empresas dedicadas a la instalación de placas en cubierta, que registran un fuerte incremento tanto en consultas como en ventas. De hecho, el crecimiento de esta alternativa es de tal magnitud que hasta gigantes como Repsol y Telefónica España han constituido una sociedad para el desarrollo del negocio de autoconsumo fotovoltaico.
De acuerdo con los datos de la Conselleria, 2019 se cerró con 476 instalaciones de autoconsumo en territorio valenciano, mientras que en 2020 fueron 4.048 unidades. El despegue arrancó a partir del segundo trimestre de 2021, cuando se alcanzaron las 2.338 instalaciones. Hasta ese momento se fluctuaba entre las 1.800-1.700 por trimestre. Eso sí, el gran impulso llegaría en los últimos tres meses del pasado año cuando se llegaron a las 4.431 unidades, una cifra que en el primer trimestre de 2022 ya se ha superado: 4.760 instalaciones.
Este crecimiento pone de manifiesto la particular 'época dorada' que vive este sector, cuya penetración cada vez es mayor no solo a nivel autonómico, sino también nacional. Así, a lo largo del pasado año, el autoconsumo se catapultó en España con una subida del 85% respecto al ejercicio anterior, al instalarse 1.151 MW de potencia, según los datos de la Asociación de Empresas de Energías Renovables (APPA). Y es que no solo se incrementa el número de desarrollos, sino también de usuarios. En la autonomía valenciana hay actualmente 20.969 consumidores que ya cuentan con este tipo de infraestructuras, según los datos de Economía.
Aunque la fotovoltaica es sin duda la tecnología con más instalaciones en la región, también hay 34 desarrollos que proceden de otro tipo de energías. En concreto, de las 20.671 instalaciones de autoconsumo en la autonomía valenciana, 20.638 son fotovoltaicas, mientras que 25 corresponden a cogeneración de gas, principalmente en la provincia de Castellón; otras tres son de central biogás-biolíquido digestores; otras dos de cogeneración de gasoil e hidroeléctrica menor o igual a 10 MW, respectivamente.
Todo ello, supone una potencia instalada en la región de 334.379,5 kW, principalmente procedente de la fotovoltaica, el 61,87%. Pero también destaca la cogeneración de energía, que representa el 37,87% de todo el autoconsumo en la Comunitat y que deriva del sector de cerámico de Castellón. Tanto es así que la mayor parte de esa potencia se encuentra en la provincia del norte de la autonomía. El resto de tecnologías son más residuales, según los datos de Economía.
Por provincias, la de Valencia es la que cuenta con mayor número de instalaciones, 9.794 y, por tanto, la que genera mayor potencia 105.391,88 kW. En este sentido, los municipios con mayor despliegue son Oliva con 4.058,76 kW en fotovoltaica; Llíria con 3.951,79 kW entre fotovoltaica y cogeneración; Paterna, 3.658,66 kW en fotovoltaica; y Riba-roja de Turia con 3.633,41 kW.
A poca distancia está Alicante que tiene actualmente 8.756 instalaciones, que generan 82.868,79 kW. En esta provincia destaca el desarrollo de la fotovoltaica siendo la principal fuente empleada en la mayoría de sus municipios. Destacan por potencia instalada Elche con 7.835,36 kW; Orihuela, 6.091 kW; la ciudad de Alicante con 5.675,98 kW; y Villena con 3.322,85 kW.
En cambio, en Castellón el clúster cerámico ha propiciado que en la provincia la cogeneración esté más desarrollada y sea la principal fuente de autoconsumo. A cierre de marzo, la provincia contaba con 2.131 instalaciones que generaban una potencia de 146.118,85 kW. L' Alcora es el municipio con mayor desarrollo ya no solo en la provincia, sino a nivel autonómico al contar con 57.787,23 kW en fotovoltaica y cogeneración. Le sigue Nules con 18.867 kW; Onda con 16.933,66 kW; y Vila-real con 11.453,63 kW.
Unos datos que reflejan el tirón del autoconsumo en la Comunitat Valenciana y que irá a más en los próximos meses. Desde la Conselleria de Economía ya auguraban este aumento dado que las solicitudes se habían incrementado desde el estallido de la guerra. También, desde el sector señalan que la mayor concienciación sobre el medio ambiente sumado al altísimo coste de la luz está propiciando que muchos vean en el autoconsumo una alternativa para minimizar sus costes.
Un tirón que apunta a tener continuidad después de que el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) aprobara en junio del pasado año 900 millones de euros en ayudas al autoconsumo y 220 millones al almacenamiento, de los que algo más de 67 millones de euros los recibirá la Comunitat Valenciana.
La propia Conselleria de Economía, a través de Ivace Energía, iniciaba hace unos días la tercera edición de la línea de ayudas para impulsar las instalaciones de autoconsumo de energía eléctrica en comunidades de energías renovables, con un presupuesto para 2022 de cinco millones de euros, un 150% más respecto al presupuesto de 2021.