Foto: CONSORCIO PROVINCIAL BOMBEROS ALICANTEALICANTE (EFE/EP). El incendio forestal que se inició la noche del sábado en Vall d'Ebo (Alicante), provocado presumiblemente por un rayo, afecta ya a 9.500 hectáreas de superficie, en un perímetro de 65 kilómetros al norte de la provincia de Alicante, y a lo largo de la jornada de este lunes ha añadido nuevos desalojos a los 1.200 evacuados de distintas poblaciones de la zona.
De hecho, la Guardia Civil ha iniciado a mediodía la evacuación de viviendas en la zona de la Garrotxa, en la Vall de la Gallinera. Los servicios de Emergencias, por su parte, han ordenado esta tarde la evacuación de las localidades alicantinas de Tollos, Famorca, Facheca, Beniaia y la Vall d'Alcalà ante el avance del incendio que se inició en la Vall d'Ebo. Antes, se había evacuado a vecinos de urbanizaciones en la Vall de Gallinera y Pego, de diez viviendas de Castell de Castells, y de los núcleos de población de Alcalà de la Jovada, Benirrama y Beniali, con más de 1.200 personas desalojadas. Durante la noche del domingo al lunes el fuego se ha aproximado a viviendas del municipio de Adsubia.
Según ha informado el Consorcio de Bomberos de Alicante, a los 25 medios aéreos que operaban en la zona (15 autonómicos y el resto de otras autonomías y del Estado), se ha sumado uno más procedente de Murcia; se trata de un helicóptero con una brigada helitransportada.
Por su parte, la consellera de Justicia y Gobernación, Gabriela Bravo, ha indicado tras presidir la reunión del Centro de Coordinación Operativa Integrada para analizar la evolución de los incendios forestales que afectan a las tres provincias de la Comunitat (Vall d'Ebo, Les Useres y Calles), el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se ha puesto en contacto con el 'president' de la Generalitat, Ximo Puig, para poner a disposición del ejecutivo valenciano todos los medios disponibles.
En todo caso, ha hecho hincapié en que el de Vall d'Ebo es un fuego "muy complicado" por la topografía "muy compleja" del terreno, que es de "muy difícil acceso", que dificulta aún más los trabajos. De hecho, ha subrayado que la actividad se tiene que desplegar a través del aire pero ha recalcado que tampoco pueden participar un número "muy excesivo" de aéreos porque el humo está dificultando la visualización para los pilotos y tienen que planificar bien la cifra para poder puedan trabajar en un marco de seguridad. "La vida de las personas y profesionales están por encima de todo", ha dicho.
Mientras, un total de 107 personas ya han sido acogidas en el albergue provisional instalado por la Cruz Roja en Pego para los afectados por el virulento incendio forestal de Vall d'Ebo. Según ha informado a Efe la Cruz Roja, son 53 varones, 50 mujeres, 3 niños y 1 niña que, con toda probabilidad, pernoctarán en el albergue, situado en el Espai Veïnal de Pego y dotado con camas, comida, bebida y personal para la atención integral de los afectados por el fuego.
Se calcula que, al menos, 1.200 personas han sido desalojadas hasta ahora a causa de este incendio forestal que sigue activo al norte de la provincia de Alicante, aunque la inmensa mayoría han sido realojadas en viviendas de familiares y conocidos. Los continuos cambios de dirección del fuego y la irregular orografía, con pronunciados desniveles, dificultan las tareas de extinción de numerosos medios aéreos y terrestres, con la colaboración de la UME.
El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha visitado esta tarde el puesto de mando avanzado desde el que se coordinan las tareas de extinción y ha agradecido la labor de todos los profesionales que trabajan en las mismas. "Es uno de los incendios que nunca deberíamos conocer. Fue originado por un rayo y se está desarrollando con una dificultad que hace imposible que se pueda atajar con la velocidad que desearíamos", ha apuntado.
El president ha apuntado que las previsiones meteorlógicas de cara a la noche apuntan a entradas de vientos más frescos y húmedos que podrían ayudar a contener la expansión del fuego. "Vamos a renacer. Lo más importante es que no hay daños personales y se han limitado también los daños en los bienes. Los desalojos preventivos afectan a más de 1.000 personas, pero son esenciales para proteger a la gente", ha detallado Puig, quien ha informado de que hay unas 140 personas en los albergues que la Cruz Roja ha montado en Pego y Muro de Alcoy.
Por su parte, en un comunicado, el presidente de la Diputación de Alicante y del Consorcio Provincial de Bomberos, Carlos Mazón, ha señalado que en torno a 300 bomberos actúan en la zona para tratar de contener las llamas por un incendio que nos sigue teniendo a todos con el corazón en un puño".
Según Mazón, la labor de los bomberos se desarrolla en unas condiciones "extremas" y ha permitido salvar "literalmente el (cercano) municipio de Vall de Alcalá" y ha añadido que los efectivos continuarán trabajando "incansablemente para garantizar la seguridad de las personas de las zonas afectadas".
