CASTELLÓ. La portavoz del Partido Popular en el Ayuntamiento de Castelló, Begoña Carrasco, insta a la alcaldesa Amparo Marco a "asumir que las plagas de mosquitos en la capital no son un problema menor" y, por tanto, "es necesario actuar para que no acaben alterando a la vida diaria de los castellonenses, como pasó ayer obligando a suspender los entrenamientos del fútbol base en las instalaciones deportivas del Chencho, donde fueron muchísimos los niños que salieron corriendo del campo ante la amenaza de nubes de mosquitos que no hubo manera de ahuyentar", explica.
En este sentido, Carrasco insiste en que el problema que suponen estas plagas, "ni mucho menos ha pasado". "Hay que redoblar esfuerzos para atender las numerosas quejas vecinales que siguen llegando desde todos los distritos de la ciudad. En Marjaleria, en el centro del Grau, en las instalaciones deportivas del Chencho, en as del Javier Marquina, en los parques, jardines y plazas no se puede estar sin ser acribillado por los mosquitos", señala.
Mediante un comunicado, el PP insiste en que se trata de un problema "que afecta a todos, ni quiera la hostelería se salva". "Las terrazas se vacían de clientes por temor a las picaduras, porque se ha convertido en un problema de salud pública con vecinos que han acabado en urgencias por la virulencia de las picaduras, y con las consiguientes pérdidas económicas que ello supone para los negocios que tratan de sobreponerse a la crisis que ha traído esta pandemia" explican.
Carrasco pide a Marco "soluciones efectivas" contra los mosquitos para evitar que este problema vaya a más. "Lo que perciben los castellonenses es que el gobierno municipal les tiene abandonados, que mira hacia otro lado mientras los mosquitos campan a sus anchas impidiendo a los ciudadanos hacer vida normal. Los castellonenses necesitan soluciones y éstas lleguen ya. Sabiendo que entramos en unos meses donde las lluvias son frecuentes, el gobierno municipal no puede relajar las medidas en la lucha contra las plagas de mosquitos. Los vecinos no dejan de recordárselo porque el problema lo sufrimos todos", concluye.