El PSPV rechaza la tasa turística de Compromís y busca otra fórmula para gravar los pisos turísticos

VALÈNCIA. El grupo parlamentario socialista no tiene intención de aprobar la enmienda de aproximación presentada este lunes por Compromís que, en línea con lo propuesto por la vicealcaldesa de València, Sandra Gómez, pretendía dotar a los ayuntamientos de mayor autonomía para aumentar la tasa turística si así lo desearan.

La semana pasada, la también edil de Urbanismo Gómez, propuso introducir un recargo especial para los pisos turísticos que triplicaba el importe máximo del diseño actual de la tasa turística pactada por el tripartito en Les Corts Valencianes. La idea era que todo aquel que visitase la ciudad y se alojara en un apartamento turístico pagase 6 euros por noche. Una iniciativa que no gustó al sector y desconcertó a los partidos del Botànic, incluido el suyo, el PSPV. 

En aquel momento, Compromís fue el partido que mejor acogió la propuesta, si bien al inicio el grupo parlamentario cuestionó la "coherencia" de los socialistas, que en Les Corts rechazaron al principio la tasa y más tarde invitaron a sus alcaldes a no aplicarla. Sin embargo, la coalición que dirige Papi Robles se mostró favorable a ofrecer a los ayuntamientos mayor libertad en la gestión de sus tributos, por lo que esta misma semana presentó una enmienda de aproximación para intentar modificar la ley actual que se debatirá este viernes en comisión. 

El texto registrado incorporaba un nuevo artículo que introducía la posibilidad del "recargo municipal voluntario". "Los ayuntamientos podrán establecer, en ejecución de su autonomía municipal, un recargo sobre el impuesto valenciano a las estancias turísticas", reza el artículo. "Este recargo se exigirá a los mismos sujetos pasivos -es decir, el turista-, en los mismos casos contemplados en la normativa reguladora del impuesto y consistirá en un porcentaje sobre la cuota íntegra de hasta un máximo del 200%", continuaba el redactado. Para hacerlo efectivo, cada consistorio fijaría el recargo en cuestión en una ordenanza. 

Los valencianistas ofrecieron a sus socios darse un margen para estudiar la propuesta que, si bien había sido redactada por ellos, partía en cierto modo de su concejal socialista en el Ayuntamiento de València, que era quien había propuesto en origen poner en marcha un recargo de este tipo, aunque con ciertos matices porque solo lo circunscribía a los apartamentos turísticos. El viernes, así, los tres grupos que integran el Botànic deberían votar las enmiendas que ya fueron pactadas en su día y este texto nuevo. 

Algo que, según fuentes parlamentarias, no ocurrirá. PSPV, Compromís y Unides Podem ya han mantenido una reunión en la que los socialistas han trasladado a sus socios que no están dispuestos a debatir ni apoyar esta enmienda. Razonan que las enmiendas que votarán el próximo 28 de octubre serán las que se acordaron hace meses y se debatieron con la Federación Valenciana de Municipios y Provincias (FVMP), pero no darán cabida a cambios de última hora como este. 

El rechazo a la propuesta, sin embargo, aseguran fuentes municipales que no supone un portazo por completo a aplicar un recargo a los apartamentos turísticos si así lo desean los consistorios, sino al planteamiento que han hecho los valencianistas en Les Corts. Critican que el diseño que propone Compromís afectaría a todo tipo de alojamientos, y no es algo con lo que el PSPV esté de acuerdo. Sin embargo, no descartan buscar otra fórmula que afectara únicamente a los pisos turísticos.  

Desde el PSPV en el Ayuntamiento de València aseguran que se está buscando una fórmula que afecte exclusivamente a los pisos turísticos y, de no hallarla antes de la votación de enmiendas de este viernes, no descartan que pudiera modificarse la ley a posteriori. Incluso, a través de la Ley de Acompañamiento de 2023 o a través de un decreto ley. 

El texto de Compromís

La enmienda redactada por Compromís contemplaba que las competencias para aplicar este recargo, su recaudación y potestad sancionadora hubiera correspondido a la Agencia Tributaria Valenciana. Esta también debería establecer mediante el desarrollo de un reglamento "los plazos y forma para efectuar la liquidación a los ayuntamientos que apliquen este recargo". Y el recargo no hubiera podido contar con ningún tipo de bonificación. 

Según la tabla registrada por los valencianistas, los usuarios de pisos turísticos deberían abonar 2 euros por noche en caso de ser un alojamiento de categoría "superior" y 1,5 euros si fuera "estándar". Con el aumento del 200% de la cuota íntegra, en caso de aprobarse el texto mencionado, los consistorios podrían duplicar estos importes para que los turistas que elijan este tipo de alojamientos, paguen 4 y 3 euros respectivamente. 

Ahora bien, la posibilidad de duplicar el importe de la tasa no quedaba limitado únicamente a los pisos turísticos. Sino que dejaba abierta la posibilidad a que esta se hiciera con todo tipo de alojamientos. No obstante, el objetivo de Sandra Gómez era centrar la 'ofensiva' en los pisos turísticos porque los ciudadanos no deberían "vivir en hoteles", según expuso en su día. A su juicio, los apartamentos turísticos "ejercen una presión muy importante sobre el alquiler residencial, además de que pueden generar problemas de convivencia", según la edil socialista, por lo que a su juicio "no es un tipo de oferta a fomentar por parte de las ciudades".