CASTELLÓ. Arranca la segunda edición del ciclo formativo de Grado Medio en mantenimiento de redes y estaciones de tratamiento de agua. Una formación que imparte desde el curso pasado el IES Politècnic de Castelló en colaboración de Facsa, que ha tenido un papel muy activo incluso en el diseño del programa formativo, coordinado por la Generalitat Valenciana.
El programa, que solo se imparte en ocho centros de España, cuenta con un total de 23 alumnos -11 en el primer curso y 12 en el segundo- y se llevará a cabo en la Escuela de Formación Facsa, un espacio destinado al aprendizaje práctico que la compañía ha habilitado para que sus profesionales transmitan al alumnado competencias técnicas y operativas clave para desarrollarse como técnicos en mantenimiento del sector del agua.
Esta escuela-taller se une a la ya existente Sala de Formación -con un enfoque más teórico- y está dotada de todo lo necesario para que el estudiantado pueda aprender los procesos de montaje y mantenimiento de las redes de distribución de agua potable y saneamiento, así como la instalación, manejo y conservación de todos los equipos de operación, control y medición y demás elementos que acompañan al agua desde su origen hasta su retorno al medio.
Además, con el fin de acentuar el carácter didáctico del centro, el taller cuenta con un circuito a tamaño real provisto de depósitos y tuberías transparentes que representa los diferentes procesos que intervienen: la captación, potabilización, distribución y saneamiento de las aguas. Este circuito es construido por el alumnado de segundo curso para fomentar la parte práctica del ciclo formativo.
Adicionalmente, durante el curso se han programado visitas a diversas instalaciones que Facsa gestiona en la provincia de Castelló, para que el alumnado conozca de primera mano las distintas tecnologías de tratamiento de agua y afiance así los conocimientos aprendidos comprobando sus aplicaciones prácticas.
Esta apuesta responde al firme compromiso de Facsa con la formación y el talento, pues la colaboración con los centros educativos son una oportunidad para dotar al sector de profesionales cualificados que hagan posible continuar llevando a todos los hogares un bien tan esencial como es el agua.
Desde la compañía también sostienen que esta es una iniciativa formativa muy interesante tanto para el alumnado, que logra finalizar sus estudios porque aumenta sus posibilidades de incorporación al mercado laboral, como para Facsa y el sector en general, por la posibilidad de conectar con un perfil joven interesado por esta profesión y brindarle una cualificación y especialización según las necesidades del sector. Algo que, además, facilita el relevo generacional en la compañía.
