CASTELLÓ. El líder de Vox en el Ayuntamiento de Castelló, Luciano Ferrer, presiente que le viene encima un marrón con la comisión de investigación sobre la sala de Emergencias y Seguridad. El bloqueo actual respecto a la presidencia, sin que ninguna de las partes dé su brazo a torcer, pone el foco sobre el único edil de la formación de ultraderecha. Su perfil cumple las exigencias de la alcaldesa, Amparo Marco, que busca delegar en un regidor de la oposición sin etiquetas.
Como bien define el portavoz del ejecutivo local, Rafa Simó, "no tiene que haber estado en el gobierno anterior y no se debe haber significado en temas o en debates municipales de seguridad ciudadana". Estos condicionantes singularizan a muy pocos concejales. Casi se pueden contar con la palma de una mano.
Entre ellos aparece Alejandro Marín-Buck, de Ciudadanos, al que el tripartito ha ofrecido por tercera vez la presidencia. "Consideramos que su perfil es el mejor. Por eso volvemos a pedir que no esquive las responsabilidades en una comisión de investigación que él mismo ha pedido. Si rechaza el ofrecimiento, debería dar explicaciones", subraya Simó.
Sin embargo, fuentes de la formación naranja aseguran que no piensan ceder ante la presión de la alcaldesa. Es más, el partido cierra filas en torno a Vicente Vidal y se reafirma en su designación como representante.
Descartado Marín-Buck, los candidatos todavía se reducen más después de las declaraciones del portavoz del gobierno, que elimina de la ecuación a los miembros que el Partido Popular ha propuesto para el órgano fiscalizador, Vicent Sales y Sergio Toledo, por "incompatibilidad". "Es evidente que el PP, que creó la marca Proxpol bajo su etapa en el gobierno y que nombró al actual jefe de la Policía Local, no cumple con el perfil deseado para la presidencia", añade.
Además, se suma otro elemento que, para el Acord de Fadrell, deslegitima al principal partido de la oposición. "El jefe del CIMSE [el centro de Emergencias] y uno de los responsables de la marca Proxpol es miembro de la junta local del PP".
Simó se refiere a Manuel Rodríguez, titular del área de Seguridad Ciudadana en el Comité Ejecutivo popular. "Este policía ha emitido informes siempre que el PP ha preguntado sobre este tema en comisión. Quiero dejar claro que es un buen profesional y estamos muy satisfechos de su trabajo, pero su vinculación hace incompatible que cualquier candidato popular pueda presidir la comisión", subraya.
Ante esta situación, Ferrer empieza a considerar como factible la posibilidad de que su nombre esté encima de la mesa. De hecho, en los últimos días ha hablado del asunto con sus más allegados. Consultado sobre este extremo por Castellón Plaza, el portavoz de Vox se limita a señalar que "personalmente no tengo intención de solicitar la presidencia, pero si la alcaldesa me la ofrece será importante saber en qué condiciones".
Más de una semana después de haberse aprobado, en una sesión extraordinaria, la constitución de la comisión de investigación, sigue sin producirse avance alguno respecto a la presidencia. Lo único cierto es que el Reglamento Orgánico de Pleno y Comisiones otorga esa potestad a la alcaldesa que, a su vez, está facultad para delegar si así lo considera conveniente.