ALMASSORA. La Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) tramita un proyecto del Ayuntamiento de Almassora para construir un embarcadero de piraguas junto al río Millars, a la altura del paraje de Santa Quitèria. La intención municipal es abrir el cauce fluvial a los deportes náuticos y dotar de actividad al paraje de Santa Quiteria durante todo el año.
La CHJ acaba de abrir el periodo de presentación de alegaciones al proyecto del embarcadero. Una vez estén contestadas, la entidad pública dependiente del Gobierno resolverá la solicitud. Lo más probable es que la CHJ otorgue el permiso a Almassora dado que ya levantó en el año 2015 el veto que mantenía a este tipo de proyectos náuticos para evitar la propagación de la plaga del mejillón cebra.
El proyecto del embarcadero empezó a gestarse hace tres años en colaboración con el Club de Piragüisme Almassora pero la tramitación empieza a coger ahora velocidad de crucero. El consistorio pretende construir un pantalán de acceso al río formado por una plataforma semifija de tres metros de largo, otra móvil de cinco metros y el embarcadero flotante de diez metros. Además, se construirán tres contenedores para guardar piraguas y una balsa para desinfectarlas, al margen de pavimentar el camino de acceso a las instalaciones. La culminación de la obra precisa también la autorización de la Junta de Aguas de la Plana.
Ésta no es la única iniciativa municipal ligada al turismo náutico y al río Millars. El Ayuntamiento de Vila-real ya gestionó el pasado año 2017 un permiso similar ante la CHJ para crear un embarcadero en la zona del Pantanet, en coordinación con el club de piragüismo de la localidad. La idea inicial era adecuar el antiguo Molí de Tatxes para que albergara el almacén de piraguas pero se descartó. De momento la iniciativa vila-realense también tardará en ser realidad.