Foto: ANTONIO PRADASCASTELLÓ. Tregmul Trade, sociedad promotora de la macroplanta fotovoltaica Magda, deberá modificar el trazado de la línea de evacuación de la instalación para que no interfiera en la futura línea de Muy Alta Tensión (MAT) Morella-La Plana, que ya ejecuta Red Eléctrica Española (Redeia).
Así lo refleja el Ministerio de Política Territorial en su reciente resolución en la que otorga la autorización administrativa previa al macroproyecto de energía renovable, que prevé 258.622 módulos fotovoltaicos y una potencia global de 127,8 megavatios en Les Coves de Vinromà, Cabanes y Benlloc. En ese documento, el ministerio da por buenos los retoques que plantea Tregmul Trade a su propio proyecto para aliviar así el innegable impacto medioambiental de Magda y hace oídos sordos al grueso de las más de 2.800 alegaciones presentadas.
En su escrito, Redeia había advertido de que el trazado de la línea aérea de evacuación de 400 kilowatios incurre en "solapamientos y paralelismos no reglamentarios" con la MAT. En su respuesta, Tregmul Trade se compromete a variar el trazado, algo que Redeia da por bueno. En cambio, en el caso de Vilafamés, la promotora solo se muestra dispuesta a compensar económicamente al Ayuntamiento por la afección a la MAT pero sin tocar el recorrido.
La sociedad inversora también prevé modificar el trazado de la línea de evacuación en otros puntos: en los términos municipales de la Torre d'en Doménec y Vall d'Alba para reducir el impacto paisajístico; en Benlloc la desplazará más al este para evitar que se convierta en una barrera urbanística que impida el crecimiento del casco urbano; y en Alcalà de Xivert estudiará la viabilidad de soterrar un tramo.
Tregmul Trade también se compromete a definir con más detalle en el Estudio de Integración Paisajística el impacto que tendrá la línea de evacuación en Vilanova d’Alcolea. Por último, la promotora de Magda se compromete con el Ministerio de Transportes a corregir la ubicación de un huerto solar para alejarlo del trazado de la autovía A-7, al igual que otro previsto en Cabanes para que no ocupe un terreno municipal.
Los cambios propuestos por la sociedad impulsora de Magda no satisfacen a ninguno de los 11 ayuntamientos alegantes. Tampoco a la Conselleria de Economia Sostenible, que rechaza el diseño del macroparque fotovoltaico en varias islas, ya que están muy distantes entre sí y no comparten las líneas de evacuación; ni a la Conselleria de Política Territorial, que considera inviable la enorme superficie de Magda porque supera el límite del 2,5% de terreno ocupado en suelo no urbanizable.
Entre las más de 2.800 alegaciones presentadas también figuran de colectivos ecologistas y de entidades como la Cooperativa Agroalimentaria Sant Isidre de les Coves de Vinromà, que ve en riesgo su propia viabilidad al considerar que Magda supondrá una reducción en la producción de alimentos ecológicos.
La reciente autorización del Gobierno a Magda es un paso más en los dos años y siete meses de tramitación de la instalación. En este tiempo, Tregmul Trade ha variado el proyecto inicial dos veces para reducir el tamaño de la planta, aunque mantiene la potencia global de la macroplanta en los 127,8 megavatios iniciales.
La intención de la promotora es negociar la compra de terrenos con el mayor número posible de afectados para evitar así el siempre difícil proceso de expropiaciones, tal y como ha anunciado, pero no se prevé una tarea fácil.
