VALÈNCIA (EFE). La Unió de Llauradors vuelve a alertar sobre los peligros que representa consumir naranjas de fuera de la Unión Europea y en concreto de Sudáfrica. La organización agraria ha realizado un estudio que eleva a 62 las materias activas prohibidas en la UE que utilizan los productores y exportadores sudafricanos para tratar su fruta.
De estos productos, tres están catalogados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como "extremadamente peligrosos" y otros diez como "altamente peligrosos". Así lo ha detallado este martes el secretario general de la Unió, Carles Peris, quien ha presentado junto al presidente de la Asociación Valenciana de Consumidores y Usuarios (Avacu), Fernando Moner, las conclusiones del informe, que detalla las 305 sustancias que en Sudáfrica se utilizan para tratar la naranja.
Según ambos, el estudio -para el cual no se han realizado analíticas, sino que se han recabado los datos de la Dirección General de Salud Pública de la Generalitat, la Agencia Española de Consumo y Seguridad Alimentaria y la Autoridad Europea Alimentaria- "constata con datos una evidencia", la utilización de productos prohibidos en Europa, concretamente 62, frente a los 50 que en un primer momento estimaba la Unió.
Además, de entre los productos fitosanitarios para tratar plagas de los cítricos como la mancha negra o la Thaumatotibia leucotreta, según la Organización Mundial de la Salud, seis de ellos tienen un riesgo cancerígeno probable, cinco tienen efecto seguro sobre la reproducción humana y siete un efecto probable sobre la reproducción humana, apunta el estudio.
Por ello, Peris ha destacado que el sistema de producción y tratamiento de la fruta en el país africano es "muy mejorable", tanto para los agricultores como para la sostenibilidad ambiental y los consumidores. "El estudio refleja claramente que Sudáfrica no hace citricultura tan sostenible ni tan segura como los productores europeos", ha apuntado el secretario general de la Unió.
Tras dar a conocer todos estos datos, y después de que la Comisión Europea haya abierto la puerta a la adopción de medidas para evaluar el impacto de la llegada de fruta sudafricana, aunque por el momento se ha hablado de aspectos comerciales, el objetivo de La Unió es poner las conclusiones del informe en conocimiento del Ejecutivo comunitario, de los consumidores y del Parlamento Europeo.
A su vez, la organización agraria se plantea hacer lo propio con otros países terceros que "introducen un aforo excesivo" en Europa como Marruecos, Túnez o Egipto y que actúan de forma similar a Sudáfrica con el tratamiento de los cítricos que después hacen llegar a los lineales de los supermercados europeos.
Por ello, Peris ha cuestionado cómo es posible que la Comisión permita la entrada de cítricos de terceros países con materias activas prohibidas para los productores europeos, con el riesgo potencial para la salud de los habitantes del Viejo Continente que ello supone, por no hablar de la falta de sostenibilidad y la competencia desleal respecto a los citricultores europeos.
En este sentido, Moner ha indicado que lo que se pretende es advertir a la UE y a los propios consumidores europeos de que hay que estar "muy vigilantes" para que no se llegue a consumir fruta que todavía cuenta con residuos de productos peligrosos para la salud, puesto que son materias "que si superan unos límites pueden provocar potencial daño a la salud de los consumidores".
El presidente de Avacu ha abogado por controles más exhaustivos, sobre todo en algunas "aduanas demasiados laxas" de la Unión Europea. También lo ha hecho Peris, quien ha reclamado que la CE "sea más estricta" en los controles y ha denunciado "laxitud" en algunos puertos, fundamentalmente del norte de Europa.
Por todo ello, desde la Unió reclaman que se prohíba importar cítricos de países terceros en donde se pueda usar materias activas vetadas en la Unión Europea y, especialmente, aquellas catalogadas por la OMS como extremada o altamente peligrosas. Del mismo modo, la organización agraria pide que se realicen analíticas a todas las entradas de cítricos en territorio de la Unión Europea procedentes de países terceros con el fin de rechazar los envíos con detección de materias activas no autorizadas en Europa.
Este punto, el de cumplir la normativa fitosanitaria europea, se debería incluir, además, en los acuerdos comerciales entre la UE y países terceros. Asimismo, el sindicato agrario solicita también una unificación a nivel comunitario de los criterios y normas de inspección fitosanitarias en frontera, la prohibición de la importación de cítricos procedentes de zonas con plagas y enfermedades declaradas de cuarentena por la Unión Europea; así como establecer la obligatoriedad del tratamiento en frío para las importaciones de países terceros con plagas.