Foto: KIKE TABERNERVALÈNCIA. La construcción ha sido uno de los sectores económicos que más golpes ha tenido que sortear en estos últimos años. La paralización de las obras durante la pandemia, la falta de suministro o el encarecimiento de las materias primas y, por ende, la subida de costes han sido solo algunos de los frentes que han puesto en jaque a la este sector y la economía en general. Y, pese a que muchas empresas han logrado esquivar la situación, otras muchas se han quedado por el camino.
A cierre de 2022 había en la Comunitat Valenciana más empresas vinculadas a la construcción que un año antes. Y ello pese a que la construcción es el sector que lideró los concursos de acreedores en la autonomía valenciana. Y es que, tal y como destacaba el presidente de la Federación Valenciana de Empresarios de la Construcción (Fevec), Francisco Zamora, en una entrevista con este diario, las empresas están resistiendo y no se prevé que haya una recesión en la construcción por la llegada de los fondos europeos Next Generation, aunque sí cierta ralentización en la puesta en marcha de nuevos proyectos, principalmente de vivienda.
En concreto, según los datos del Observatorio de la Fundación Laboral de la Construcción, en 2022 las empresas del sector inscritas en la Seguridad Social eran 16.310, lo que supone un 3% más que hace un año cuando había 15.636. Además, las organizaciones del sector suponen el 10,8% del total de compañías registradas en la autonomía valenciana que eran unas 151.059 en 2022, según los mismos datos.
Alicante fue la provincia donde se inscribieron más firmas vinculadas a la construcción, ya que se pasó de las 6.435 de 2021 a las 6.842 el pasado año, es decir, un 4,1% más. Le sigue Valencia con un aumento de firmas del 3,8% al pasar de las 7.450 compañías en 2021 a 7.638 a finales del pasado año, mientras que Castellón ha pasado de tener 2.002 a 2.083, un 1,6% más, de acuerdo con los datos.
Un crecimiento que no únicamente tuvo lugar en 2022, ya que el número de empresas del sector ha ido al alza estos últimos ejercicios, aunque sin recuperar los registros de 2007, antes de que estallara la crisis económica que tan tocado dejó a la construcción. Ese año había 30.886 firmas, pero el estallido de la 'burbuja inmobiliaria' llevó a más de la mitad de las compañías a cerrar.
Poco a poco se fue remontando esa situación y a la curva volvió a niveles ascendentes. Así, mientras en 2015 había 12.727 organizaciones vinculadas al sector, en 2016 eran 13.414; en 2017, unas 13.727; en 2018 se llegó a las 14.367 y en 2019 a las 15.251. El estallido de la crisis sanitaria en 2020 sacudió la tendencia y ese año se cerró con 14.890 compañías. Ya en 2021, el número de empresas creció de nuevo hasta las 15.636 que pasaron a ser 16.310 el pasado 2022.
Y ello pese a que este sector fue uno de los que aglutinó más concursos de acreedores en la Comunitat Valenciana en 2022, solo superado por el comercio, según un estudio elaborado por Informa D&B. El análisis refleja que en la región se formalizaron 1.101 concursos y disoluciones el pasado año, un 32,65% más que en 2021 que fueron 830. De ellos, la construcción registró 230 procesos y copó casi el 21% del total de concursos y disoluciones que se registraron en la autonomía. Una cifra que también supone un aumento de casi el 28% respecto a 2021.
Por provincias, el mayor número de concursos de acreedores se presentó en Valencia con 640 procedimientos de los que 133 fueron de constructoras, mientras que en Alicante se registraron 333, de los que 60 fueron de empresas del sector y en Castellón la cifra alcanzó los 128 concursos, 37 por parte de la construcción.
A nivel empleo, lo cierto es que desde el sector se lleva años advirtiendo de la necesidad de nueva mano de obra cualificada. Una necesidad que ahora se acrecienta ante la llegada de los fondos europeos. Así también lo advertía Zamora, quien cifraba en unos 70.000 los trabajadores que precisa la construcción en la Comunitat Valenciana para poder atender todos los proyectos que surgirán con la lluvia de millones de Europa.
A cierre de 2022, el número de afiliados a la Seguridad Social en el sector era de143.799 trabajadores, un 4,8% más que hace un año y un incremento más alto que la media nacional, que se situó en el 3,4%. De ese total, 98.655 personas eran del régimen general y 45.144 autónomos, según los datos del Observatorio de la Fundación Laboral de la Construcción.
Unas cifras que también han ido creciendo en los últimos años. Así, el censo de trabajadores del régimen general se ha duplicado en los últimos siete años al pasar de 45.936 profesionales vinculados a la construcción en 2015 a los 98.655 de 2022. El gran salto se produjo en 2018, cuando se incrementó la mano de obra de forma considerable ya que ese ejercicio había 58.996 trabajadores y un año después 87.850. Eso sí, todavía se está muy lejos de los 208.477 profesionales que había en 2007, antes de que estallara la crisis económica.
Asimismo, el volumen de licitación de obra pública acumulada hasta octubre registró más de 2.613 millones de euros, un 65% más que en el mismo periodo del año anterior y lo que supone un 11% del total licitado a nivel nacional.
