CASTELLÓ. Los repetidos problemas de inundaciones que se dan en la zona industrial de l’Alcora que linda con la CV-16 están más cerca de solucionarse. El Ayuntamiento ha licitado por un importe de 428.155 euros y un plazo de ejecución de 4 meses, las obras de un colector de aguas pluviales que dará salida a la fuerte acumulación de lluvias que hasta ahora desaguaban en ambas cunetas de la carretera.
La obra es de suma importancia porque, según estiman fuentes municipales, la CV-16 soporta un tráfico medio diario de 4.755 vehículos y de ellos un 18% son camiones. El principal punto donde se embalsa el agua cada vez que llueve es la glorieta que divide la carretera con el principio del Camí Foyes Ferraes, justo enfrente de la planta de la empresa azulejera Azteca.
La gran presencia de naves y campas en la zona agrava la gran escorrentía cuando llueve de forma copiosa. Al no existir una red de evacuación de aguas pluviales, las cunetas de la CV-16 ejercen como improvisados canales de drenaje, insuficientes para canalizar el agua cada vez que llueve.
Las industrias ubicadas a ambos lados de la CV-16 se asentaron hace varias décadas de forma desordenada y sin que mediaran obras de urbanización.
