Las patronales del clúster cerámico renuevan su 'segundo escalón' tras décadas de inmovilismo

CASTELLÓ. Dos de las tres asociaciones estatales que componen el clúster cerámico castellonense han resuelto en esta semana la renovación de sus secretarías generales. Se trata de un hecho excepcional que no se producía desde su fundación, en el caso de las esmalteras -Anffecc- hace 42 años; y desde hace un cuarto de siglo en lo que se refiere a los fabricantes de baldosas cerámicas -Ascer-.

Así, a partir de ahora el testigo de José Luis Breva lo cogerá su sobrino Manuel Breva, quien ya venía ocupando un puesto relevante en el organigrama de Anffecc y llevaba buena parte del peso de las responsabilidades que conlleva el cargo. En cuanto a Ascer y a falta de confirmación oficial, la secretaría general la ocupará la persona que hasta ahora venía siendo mano derecha de Pedro Riaza y secretario general adjunto de la Asociación Española de Fabricantes de Azulejo, Pavimentos y Baldosas Cerámicas, Alberto Echavarría, licenciado en ADE por la Universitat Politècnica de València y con un largo currículum en la empresa privada, además de haber sido asesor de comercio exterior.

A estos cambios vendrán otros que afectarán a la tercera pata del clúster cerámico, ya que a final de mes la Asociación Española de Fabricantes de Maquinaria Cerámica -Asebec- celebrará junta general en la que uno de los puntos del orden del día será la baja del actual tesorero. Su puesto lo ocupará de manera temporal el presidente de la entidad, Juan Vicente Bono, hasta la celebración de la asamblea de la organización prevista para finales de este año.

Por otro lado, queda pendiente la concreción de fechas para la celebración de la próxima Mesa de la Cerámica que debe convocar el presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, tras el reciente anuncio de una próxima reunión, en la que se espera puedan tratarse asuntos como son las nuevas iniciativas encaminadas a fomentar la Formación Profesional, el tratado de libre comercio entre la Unión Europea y Mercosur, el Brexit o los altos costes energéticos que afronta el sector.