CASTELLÓ. Las urgencias por el Covid-19 y el pago a proveedores abocan al Ayuntamiento de Castelló a recurrir a la vía telemática para restablecer un mínimo de normalidad con la celebración de los plenos. Hasta ahora el uso de la videoconferencia se había limitado a las Juntas de Gobierno Local de carácter extraordinario, reducidas además en número de asistentes virtuales para ganar en agilidad y efectividad (seis miembros frente a los 10 de las convocatorias presenciales).
Sin embargo, el Acord de Fadrell se ha visto obligado a valorar la implementación de una herramienta de comunicación digital ante la nueva situación ocasionada por la crisis sanitaria. No solo el Plan Marshall municipal, con un paquete de medidas para promover la revitalización económica, requiere de un acuerdo de la corporación. También los denominados REC (Reconocimientos Extrajudiciales de Crédito), esenciales para pagar a proveedores.
De hecho, las facturas que debían haber pasado por el pleno ordinario de marzo, programado para el 26, están pendientes. La suspensión de la sesión ordinaria impidió tramitar la orden de abono desde Tesorería.
Los informáticos municipales llevan varios días realizando pruebas con el software Zoom para verificar su viabilidad a la hora de garantizar la participación de los 27 concejales en una misma videollamada. En este sentido, muchos de los ediles del equipo de gobierno ya se han dado de alta en previsión de que finalmente el programa ofrezca la suficiente seguridad en cuanto a privacidad al objeto de organizar los plenos de manera virtual.
Cabe destacar que se trata del mismo chat del que se servirá la Diputación Provincial para recuperar la rutina legislativa con sus 27 diputados el 7 de abril. Lo hará tras el exitoso resultado de la Junta de Gobierno de este jueves.
La celebración de plenos de manera telemática cuenta con la aquiescencia de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP). El pasado 21 de marzo remitió una circular a todos sus asociados, entre los que se encuentra el Ayuntamiento de Castelló, para informar que, en aras a asegurar el funcionamiento interno de las administraciones, "es procedente y jurídicamente posible acordar con carácter excepcional" el desarrollo de "las sesiones de los Órganos Representativos y de Gobierno Locales mediante sistemas tecnológicos de videoconferencia o similares".
"De esta forma, podrán agilizarse todos los procedimientos, como por ejemplo los relativos a la utilización de los superávit", añade el comunicado, en alusión a la posibilidad de impeler medidas económicas y fiscales que amortigüen los efectos del Covid-19 en las familias, autónomos o pymes. Es decir, lo anunciado por la alcaldesa, Amparo Marco, en días precedentes con el propósito de que el consistorio asuma el protagonismo como "motor" en la recuperación tras el coronavirus.