VALÈNCIA (EP). Las universidades públicas valencianas y su actividad asociada generan 2.715 millones de renta en la Comunitat Valenciana y 49.726 puestos de trabajo, lo que supone el 2,2% del PIB y el 2,4% del empleo valencianos.
Así, se desprende del quinto informe 'Las contribuciones socioeconómicas de las universidades públicas valencianas', elaborado por el equipo investigador del Ivie, por encargo de las cinco universidades públicas valencianas presenetado este lunes por su director José Manuel Pastor, en un acto al que ha asistido el conseller Educación, José Antonio Rovira.
Así, ha destacado que el estudio revela que el sistema universitario público valenciano (SUPV) devuelve a la sociedad, a través de la recaudación fiscal adicional generada por sus titulados, 3,1 euros por cada euro que las administraciones públicas destinan a su funcionamiento.
De este modo, frente a los 933 millones anuales en transferencias corrientes públicas que recibe el SUPV, sus titulados aportan 2.901 millones más en impuestos de los que hubieran generado si no tuvieran esos estudios universitarios, dado que tienen "más empleo y obtienen mayores ingresos".
Las cinco universidades que forman el SUVP -Universidad de Alicante, Universitat Jaume I de Castelló, Universidad Miguel Hernández, Universitat Politècnica de València y Universitat de València- concentraron el 78,2% de los estudiantes de grado, el 44,9% de los de máster, el 93,5% de la producción científica y el 100% de las patentes nacionales obtenidas por el total de universidades ubicadas en la región durante el curso 2022-2023.
En conjunto, las universidades públicas forman al 70,4% de estudiantes de grado y máster de la región. Sin embargo, han perdido peso en el agregado frente a las universidades privadas. De hecho, la matrícula de grado en el SUPV se ha contraído un 22,2% desde el curso 2010-2011, mientras que el sistema privado ha incrementado un 113,5%.
En el caso de los másteres, se ha producido un importante aumento de la demanda en ambos casos: en las públicas ha aumentado un 48,6% un crecimiento "sustancial", pero "inferior al de las privadas, que han pasado de formar al 13,5% del alumnado de este tipo de estudio al 55,1%".
Para atender a sus estudiantes y desarrollar su labor investigadora, las universidades públicas valencianas cuentan con 12 campus con 60 centros, entre propios y adscritos, y un presupuesto de 1.515 millones de euros, en el curso 2022-2023. Esa cifra supone solo un incremento del 1,8% respecto del presupuesto del curso 2010-2011.
El 62% de los ingresos procede de transferencias corrientes de la Administración Pública, para asumir el funcionamiento de las instituciones, otro 22% son transferencias de capital, para afrontar las nuevas inversiones; y el 16% restante se obtiene de otros ingresos, entre los que se incluyen las matrículas que abonan los estudiantes. En conjunto, las cinco instituciones ofrecen 234 titulaciones de grado, 339 másteres oficiales y 139 programas de doctorado.
Asimismo, se ha registrado un cambio en la especialización formativa, ya que mientras el porcentaje de matrícula en grados de ingeniería y arquitectura se ha recortado un -6,6% (-5,8% a nivel nacional), los estudiantes que se han decantado por Ciencias de la Salud han aumentado un 6,4% (7,4% en España). Asimismo, el informe vuelve a alertar, como ya hizo en 2019, de la pérdida de estudiantes en las áreas STEM pese a la fuerte demanda del mercado de trabajo de estos titulados.
Pastor ha explicado que los factores que determinan la elección de una universidad han cambiado en estos años. De este modo, el criterio de proximidad ha perdido relevancia y la proliferación de las universidades privadas ha impulsado la competencia. Las instituciones del SUPV han orientado su estrategia hacia la atracción de estudiantes con altos expedientes académicos y a fomentar la exclusividad de las titulaciones. En el curso 2022-2023 una cuarta parte de los títulos ofrecidos por el SUPV son exclusivos sobre todo en las áreas de ingeniería y arquitectura (32%), seguidas de humanidades (30,8%).
Además, destaca el aumento registrado en el número de estudiantes procedentes de fuera de la Comunitat al pasar del 10,1% en el curso 2010-2011 al 17,9% en 2022-2013. También los estudiantes de máster procedentes de fuera de la región han aumentado, desde el 25,5% que representaban hace una década hasta el 36,2% del curso 2022-2023.
Los programas de movilidad han influido "muy positivamente" en la atracción de estudiantes no residentes en la Comunitat: 6.000 estudiantes de grado y 560 de máster de otras regiones o del extranjero en el curso 2022-2023. El gasto que realizan en la región tiene un importante impacto económico, ya que suponen 21,2 millones en renta para la Comunitat y la creación de 610 empleos.
Por otro lado, concluye que juegan un papel "crucial" en la generación de capital humano cualificado y en la producción de conocimiento, superando en responsabilidad a sus homólogas a nivel nacional. De la inversión total en I+D de la Comunitat, el 42,7% la realiza el sector de la enseñanza superior, un porcentaje muy superior al promedio nacional (26%) y al de regiones de referencia como País Vasco (16,8%), Madrid (18,7%) y Cataluña (19,8%). El volumen de publicaciones científicas ha crecido más que la media nacional, duplicándose el número de artículos científicos desde los 4.945 de 2010 a los 10.080 en 2021.
Prácticamente toda la actividad investigadora de la Comunitat la realizan las universidades públicas, ya que generaron el 95,8% de las publicaciones científicas entre 2010 y 2021 y el 100% de las 39 patentes nacionales surgidas de la investigación universitaria en 2021 procede de alguna institución del SUPV.
La evolución de la actividad patentadora del SUPV es "más positiva" que en el conjunto de España. Como consecuencia de ello la participación del SUPV en el sistema universitario público español (SUPE) ha pasado de representar un 10% de las patentes nacionales a un 20%.
Asimismo, los titulados universitarios disfrutan de un porcentaje mayor de contratos indefinidos en el sector privado y menor de empleo parcial no deseado que los trabajadores con educación secundaria posobligatoria (+4,2 y -2,8 puntos porcentuales, respectivamente).
Además, son menos frecuentes las jornadas largas entre los titulados y perciben salarios más elevados y buscan menos activamente otro empleo, participan más en formación continua y acceden en mayor proporción a empleos altamente cualificados y al teletrabajo. Sin embargo, afrontan más horas extras no remuneradas, cambios imprevistos de horarios, presión laboral y contactos fuera del horario laboral, que los trabajadores con educación secundaria posobligatoria".
Además, el porcentaje de empleados con jornadas parciales no deseadas se reduce en 0,8 puntos porcentuales, el peso del teletrabajo aumenta 4,8 puntos, el de trabajadores en ocupaciones altamente cualificadas crece 15,9 puntos y el de ocupados que participan en formación continua se eleva en 3,5 puntos.
También el salario medio es un 11% más elevado por la contribución de los trabajadores titulados en el SUPV y sin el SUPV, la tasa de desempleo en la Comunitat sería 2 puntos porcentuales más elevada Del mismo modo, ha destacado que "un buen sistema universitario proporciona trabajadores altamente cualificados, lo que fomenta un tejido empresarial productivo, innovador y basado en el capital humano", lo que, a su vez, "genera empleo de calidad y estimula la inversión en educación superior, impulsando la resiliencia económica, especialmente, en tiempos de crisis".