VALÈNCIA. La música cuenta todo tipo de historias… y la mayoría son de amor. Entre la cantante Letizia Conceta y su productor Juan Diego hubo, en su momento, canciones dedicadas y melodías que sonaban sólo perfectas para ellos dos. Se dice que los amantes escuchan únicamente lo que quieren y se creen que todas las composiciones son para ellos, y puede que en este caso la historia si que sea así: Letizia canta sobre el amor a su productor en Curro Jiménez, el primer single adelanto de El querer(se), el álbum de la valenciana que verá la luz a lo largo de este año. Con motivo de relatar esta historia de amor no correspondido Letizia rescata de la memoria el momento en el que ella y Juan Diego veían la serie de Curro Jiménez, y compone una historia de amor “mecida por el viento” como cabalgaría un bandolero en la que hablan de su amor no vivido: “No lo pares, que suceda, esa cosa que no cesa”, canta Letizia a quien produce el tema. Este curioso “match” se cuenta a lo largo del disco en seis canciones que se suceden de forma cronológica: desde que ambos se alejan para gestionar el duelo hasta que pueden reencontrarse en un lugar cómodo para ambos.
El primer single del disco, Curro Jiménez, es un tema con influencias de lo urbano que sigue con la tradición flamenca y la música máquina. Su estética combina lo costumbrista con lo onírico y da paso a un relato que según Letizia se construye solo: “Mientras creamos el tema sentimos que una cosa nos iba llevando a la otra de forma muy orgánica, también como gracias a la simbología del campo podemos hablar de todo lo que nos rodea”, explica la artista. Su inspiración, más allá de la serie que vieron y su propia historia de amor, también se apoya en el ballet de Carlos Saura de Amor brujo de Manuel de Falla: “Al final nuestro tema es todo una especie de gran homenaje, lo combinamos con la música máquina y hacemos una mezcla de estilos muy rara que toma sentido de alguna forma”, añade.
Cuando Letizia escribió las letras del disco estaba en su fase de “duelo” en la que no se hablaba con Juan Diego, el ahora productor del álbum. La artista explica que una vez se reencontraron vieron que tenían que sacarlo: “Tuvimos que hablar mucho antes de comenzar a trabajar, es un compromiso enorme que ahora está sanado pero que al principio era algo muy complicado”, aclara, “Juan también ha ido comprobando cómo me iba encontrando a lo largo del proceso, para nosotros es como hacer un disco de nuestra historia”, añade la artista emocionada. Para trabajar como verdaderos profesionales admite que en algún momento tuvieron que “disociar” un poco de su realidad para tratar los temas de una forma más objetiva, aunque siempre desde el cariño, el amor y la comodidad: “Podría haber sido un proceso traumático y complicado pero para los dos ha sido algo más bien sanador, como que cierra esa etapa de nuestra relación”, añade.
La artista ya le cantaba al amor no correspondido a través de su versión de Mi buen amor, en la que evoca a ese tema que escuchó siempre durante la adolescencia y que ahora cobra una nueva vida con su voz. Esta versión, que no se incluye en el disco, desvela ese lado de Letizia más emocional y único que ahora le permite liberarse por completo a través de El querer(se), un trabajo compuesto y editado totalmente por ella y que muestra una historia de superación entre ambos.
“Me siento muy liberada porque al final para mi esto era una especie de gran secreto del que pensaba que me iba a morir. Para los dos ha sido una historia dolorosa de contar pero a lo largo del disco no hay ni un solo momento de odio ni de reproche, solo la reflexión de la pena que da que no sea mutuo”, añade la artista. Con este disco busca mostrar cómo el salto de la relación se da a que tengan que ser amigos toda la vida, desde asumirlo hasta cantarlo: “Me parece muy sanador, creo que también da un mensaje de esperanza de ver el cambio de ese amor romántico a algo que tenga más que ver con la amistad. Para mi si dos personas quieren estar juntas encontrarán la manera de hacerlo, me siento afortunada de haber vivido esto, poder contarlo y saber que puedo sobrevivir a ello”, añade.
