Los agricultores critican la "ambigüedad" del ministro, que no aporta soluciones para los cítricos

CASTELLÓN. Decepcionante. Así se puede calificar la visita del ministro de Agricultura, Luis Planas, a la Comunitat Valenciana para tratar de abordar la crisis perenne que vive la citricultura castellonense y autonómica, que en esta campaña deja pérdidas millonarias y mucha de la fruta en el árbol. 

Tras su reunión con el president de la Generalitat, Ximo Puig, y el sector (estaban los productores, las cooperativas y representantes de la industria, como el presidente de Fedacova, Federico Félix) Planas se limitó a señalar la necesidad de que los agricultores se agrupen a través de la interprofesional para tratar de recibir ayudas con las que promocionar su producto en Europa; su exigencia a la Comisión Europea para que actúe "con todo el rigor necesario" para que se cumpla la legalidad en la importación de fruta foránea; y la elaboración por parte de las mismas autoridades comunitarias de un informe que determine "si hay argumentos suficientes" para solicitar la aplicación de la cláusula de salvaguarda ante la llegada de naranja de Sudáfrica. 

Todo esto se ve por parte de los agricultores como papel mojado. El secretario general de la Unió de Llauradors, Carles Peris, presente en la cita, critica la "ambigüedad" de Planas, de quien esperaba "mucho más". Y es que, según Peris, "si la Unión Europea hace el informe, difícilmente dará el visto bueno a la cláusula de salvaguarda", porque los estadistas comunitarios se basan en datos macroeconómicos que no tienen en cuenta el punto de vista del productor, que esta campaña percibirá precios desastrosos por la fruta. 

Asimismo, Peris destaca que no es suficiente "con ser  estrictos con el control de la normativa actual" en cuanto a tratamientos fitosanitarios, sino que es necesario que los requisitos para la fruta que llega de fuera "cambien y los países terceros jueguen con las mismas reglas que nosotros". También el presidente de la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja), Cristóbal Aguado, censura que los acuerdos que la Unión Europea "tiene firmados con países terceros se han extralimitado porque no hay reciprocidad y eso nos perjudica de forma notable". 

Sin ayudas directas

Planas se ha ido así de València sin referirse a las ayudas compensatorias directas para los productores que le había venido solicitando el sector. Como tampoco a la necesidad de que la fruta importada deba cumplir un tratamiento en frío como se le exige a la autóctona que parte hacia el extranjero. En este sentido, Peris ha comentado al ministro que al agricultor le "cuesta dinero" luchar contra las enfermedades que llegan "y es una irresponsabilidad de la Administración, porque supone gastar dinero público en investigar y controlar las nuevas plagas". 

Por todo ello, aunque tanto Peris como Aguado han valorado la "buena disposición" y el "talante" del ministro, respectivamente, el presidente de AVA-Asaja considera que es el momento de implementar "hechos, mecanismos y que la interprofesional cumpla el papel que debe tener y garantizar mayor potencia para la citricultura". Por su parte, el secretario general de la Unió señala que el de Planas es "un anuncio estéril" e incide en que el ministro "tenía que haber sido más valiente y al menos haber anunciado una interpelación directa a Europa" para abordar la crisis del sector. 

Desde el PP, su portavoz de Agricultura en Les Corts, José Ramón Calpe, critica que Planas se haya ido de la Comunitat "sin concretar ni adquirir ningún compromiso con el sector citrícola, al que da la espalda".