CASTELLÓ. Los huertos urbanos Fila 13 de Vila-real han procedido recientemente al sorteo y adjudicación de las parcelas para el cultivo individual (17) y colectivo, en este caso tres terrenos por uso de entidades de carácter social y medio ambiental. El nuevo reparto de parcelas ha permitido constatar un incremento significativo en el interés de las mujeres hacia la agricultura ecológica. De hecho, con esta actualización, se ha pasado de un 28% de usuarias de los huertos urbanos a un 43%.
Otro de los datos que refleja la mayor presencia de mujeres en la agricultura ecológica se refiere a la demanda de uso de las parcelas, según han señalado fuentes municipales a través de un comunicado. Las nuevas solicitudes por parte de las mujeres han supuesto casi el 50% de la demanda, frente al 13% de requerimientos por parte de mujeres que se registraban al inicio de los huertos urbanos Fila 13, en el 2015.
En cuanto a las entidades y asociaciones, con esta nueva adjudicación hay cinco entidades que comparten espacio con los terrenos de uso individual. “Se trata de cinco proyectos dirigidos a diferentes colectivos y objetivos, que suman a los huertos urbanos un carácter social e integrador, estableciendo sinergias que crean beneficios tanto sociales como ambientales para todos los usuarios”, destaca el concejal de Agricultura, Sostenibilidad, Transición Ecológica y Energética y Medio Ambiente, José Ramón Ventura Chalmeta.
Entre las parcelas sociales, se encuentra la del centro de menores Espardenyers, que mediante prácticas agrícolas ayuda a jóvenes de 16 a 18 años a adquirir competencias curriculares que, con la formación reglada en centros docentes no han podido conseguir.
El centro de los Evangelistas de Cáritas, que facilita a los usuarios poder tener un tiempo de ocio y autoabastecimiento en casos de emergencia social, además de favorecer la autoestima, o el de Casda, que facilita este recurso para los usuarios de los pisos tutelados de la entidad, son otros de los proyectos sociales de Fila 13. También tienen parcela en los huertos urbanos el Centro de Día de Vila-real, que persigue mejorar la calidad de vida de los usuarios mediante una estimulación integral y fomentar hábitos de vida saludable, y la ONG Pankara, que cuenta con miembros especializados en la gestión de recursos agrícolas, alimentación sana, consumo responsable, sensibilización ambiental y participación, a la vez que centra sus esfuerzos en recuperar semillas de carácter local y difundir técnicas y prácticas sostenibles.
Después de esta adjudicación de parcelas, los huertos urbanos han abierto también el plazo para constituir por primera vez el Consejo de huertos urbanos, en cumplimiento del artículo 9 de la ordenanza vigente.