CASTELLÓ. Los sindicatos amenazan con ir a la huelga en los almacenes citrícolas si no hay avances en la negociación del convenio colectivo. Aunque hay una reunión prevista para el próximo viernes, día 4, "con la postura en que se encuentra a día de hoy la patronal, vamos hacia el conflicto", apuntan desde UGT.
En un comunicado, y en un movimiento que se produce siempre en esta negociación y en la de los collidors cuando se acercan estas fechas, las de mayor actividad en el sector, UGT, uno de los dos sindicatos presentes en la mesa negociadora, ha señalado que tras reunirse telemáticamente con sus delegadas ha decidido "no ceder ni un milímetro" en su postura de mantener la jornada laboral en ocho horas de lunes a viernes y rechazar la propuesta de la patronal "de diez horas diarias y de lunes a domingo".
Este punto es precisamente el que más controversia está alzando en la negociación y desde UGT señalan que no van a dar "ni un paso atrás para dignificar al sector". "Queremos poder conciliar, que si se trabajan sábados y domingos sean voluntarios como hasta ahora y que se dignifique retribuyéndolos con un incremento considerable", recoge el sindicato en su comunicado.
La plataforma de los representantes de las trabajadoras recoge además un incremento salarial "acorde al esfuerzo que este sector realiza", garantizar poder ir al médico, con horas retribuidas, "para acompañar a nuestros familiares de primer grado", eliminar la categoría encajadora-triadora sin experiencia y la estabilidad "para los trabajadores y trabajadoras que tienen contrato por ETT".
Un paquete que será difícil de asumir por las empresas, pero aun así en UGT esperan "algún movimiento por parte de la patronal" en una negociación que no ha avanzado prácticamente nada desde que se constituyó la mesa negociadora en septiembre.