CASTELLÓ. La mayor actividad del recinto de Ferias y Mercados de Castelló en los últimos meses, con una sucesión de conciertos y festivales, provoca efectos colaterales. La AAVV Bulevar Blasco Ibáñez ha remitido un escrito al concejal de Urbanismo, Sergio Toledo, para trasladarle su preocupación por las crecientes quejas de los residentes a consecuencia de los ruidos.
En la misiva, la asociación vecinal pregunta al Ayuntamiento sobre la actividad actual de Refeyme y si la repetición de eventos musicales forma parte de un cambio de estrategia respecto al uso del recinto. En este contexto, muestran su inquietud acerca de si esa nueva fórmula de gestión se va a incluir como prioritaria en el nuevo contrato de explotación, dado que "podría tener impacto negativo en el entorno y la calidad de vida de los vecinos", advierte el colectivo.
Asimismo, la AAVV interpela al edil sobre si se ha elaborado algún estudio para lo que considera "cambio de actividad". En este contexto, recuerda que la instalación, al encontrarse a 100 metros de los edificios residenciales, "incumple la normativa municipal, que establece una distancia mínima de 150 metros".
Ante el aumento de las protestas, la asociación insiste en compartir con Toledo su inquietud por la programación de los últimos meses. Del mismo modo, plantea la necesidad de conocer algunas características del pliego del nuevo contrato de explotación a fin de anticiparse al escenario de 2025, cuanto está previsto que una empresa externa gestione Refeyme.
Desde de este año, los festivales y conciertos en el recinto de Ferias y Mercados han ido en aumento, especialmente en septiembre y octubre. Por ejemplo, Melendi actuó frente a 17.000 personas el 22 de septiembre, mientras que el 28 de ese mes se celebró el festival Míticos. Apenas una semana después se estrenó el Fantastics Festival.
La idea del equipo de gobierno con la instalación del PAU Gumbau pasa por adjudicar una explotación de larga duración. Al menos, de 10 años con opciones de prolongarse hasta los 25. La amplia duración del contrato estará justificada ante la necesidad de que la concesionaria pueda amortizar la inversión que tendrá que realizar a fin de reabrir los aparcamientos subterráneos y mejorar las prestaciones de los equipamientos.
En la actualidad, el consistorio ejecuta obras para solucionar los problemas de goteras, arreglar los baños, cambiar la pintura y disponer de un nuevo alumbrado en el exterior, así como de cuadros eléctricos que garanticen la celebración de la feria. Estas actuaciones tienen un coste de 899.821 euros y deberán concluir antes del 31 de diciembre.