CASTELLÓ. La derrota del Córdoba frente al Recreativo Granada ha hecho oficial lo que era un secreto a voces: el Castellón es nuevo equipo de Segunda División. Los blanquiverdes, que debían ganar si querían aplazar una semana más el regreso de los albinegros a LaLiga Hypermotion, han caído derrotados por 3-0 en casa del colista del grupo II.
El ascenso con tres jornadas de antelación no ha hecho más que consumar al conjunto de la capital de la Plana como el absoluto dominador de la Primera Federación. Los de Dick han sido un auténtico 'rodillo' de principio a fin. No han soltado el liderato desde que lo agarraran a principio de temporada y, sus 81 puntos en 35 jornadas (el Deportivo, líder del grupo I, lleva 10 puntos menos), son buena muestra de la supremacía ejercida por los de Castalia.
Precisamente Castalia ha sido una de las claves de la excepcional campaña realizada. Un total de 46 de los 81 puntos logrados por los 'orelluts' han llegado jugando como locales. La afición del Castellón alienta a sus jugadores como pocas lo hacen, aliento que acabado por ser trascendental. Tan solo el Córdoba ha sido capaz de llevarse los tres puntos de un feudo albinegro que ha visto vencer 15 de 17 veces a sus pupilos, anotando 46 goles y encajando solo 17. Huelga decir que son, de largo, el mejor local de la categoría. Castalia ha sido diferencial en Primera Federación, como lo será también la temporada que viene en Segunda División.
Lejos de su estadio, los de Schreuder también han sido el mejor conjunto de su grupo. Los albinegros, junto con el Córdoba, han sumado un total de 35 puntos fuera de casa (11 victorias, 2 empates y 5 derrotas) y solo el Deportivo, en el grupo I, ha superado dicha cifra llegando a las 37 unidades. Nada ni nadie ha frenado al Castellón en su camino.
A pesar de todo, el artífice principal del regreso 'orellut' a LaLiga Hypermotion tres temporadas después ha sido Dick Schreuder. El neerlandés llegó a Castelló captado por Bob Voulgaris y el 'Big Data', todo tras ascender al Zwolle holandés a la Eredivisie, la Primera División de los Países Bajos.
No vino solo. De su mano llegaron también Haris Medunjanin, Daijiro Chirino y Gervane Kastaneer, tres hombres que en mayor o menor medida han sido fundamentales para conseguir el ansiado objetivo. Objetivo ahora ya cumplido.
El modelo de juego implantado por el 'hombre ascenso' tampoco ha dejado indiferente a nadie en la capital de la Plana. Su estilo atrevido, vistoso y ultraofensivo ha cautivado a una afición que ha visto como su equipo ha protagonizado grandes goleadas a lo largo de la temporada. Estilo que también ha sabido adaptar durante la misma.
Y es que el Castellón, cuando lo ha necesitado, ha sacado a relucir su versión más pragmática y sólida atrás. Lo hizo allá por Navidad, cuando el equipo sufrió su único bache de juego y resultados. Lo ha hecho también fuera de casa durante este tramo final de temporada. Mutación que le ha llevado a encadenar cuatro victorias seguidas como visitantes y a dejar atrás al Córdoba en la carrera por el ascenso directo.
Esta 'revolución' ha llevado al cuadro albinegro a ser el conjunto más goleador de la Primera Federación. Los 'orelluts' suman 72 goles a favor, seguidos (aunque muy de lejos) del Celta de Vigo B con 62 y del Córdoba con 61. Su pichichi, Jesús de Miguel, que suma un total de 16 tantos hasta el momento.
Cifras, todas las expuestas, especiales, y que no hacen más que encumbrar una temporada para la historia del Castellón. "Lo tenemos muy cerca y es muy importante. Queremos construir algo bonito. Este equipo es especial para mí", mencionaba ayer Schreuder al finalizar el partido en Murcia. Y vaya si ha sido especial y bonito. Castelló está de vuelta en la Segunda División del fútbol español. Ahora solo queda celebrarlo.