Hoy es 15 de noviembre

opinión

¿Por qué están cayendo en bolsa las empresas tecnológicas?

Inflación y endurecimiento de la política monetaria de la FED, elevados niveles de valoración y mayor regulación son las tres claves, según explica el experto

2/02/2022 - 

MADRID. Con enero concluido, puede establecerse que si hay un sector que se ha visto claramente perjudicado en el comienzo de año, éste ha sido el tecnológico.

Se apuntan tres factores para justificar su negativa evolución:

  1. Inflación y endurecimiento de la política monetaria por parte de la Reserva Federal norteamericana (FED).
  2. Elevados niveles de valoración alcanzados por las principales compañías en los últimos meses.
  3. Endurecimiento regulatorio en Europa, China y Estados Unidos.

1) Inflación y endurecimiento de la política monetaria

Uno de los métodos de valoración frecuentemente utilizados por los analistas consiste en proyectar los estados financieros de las compañías que estudian para -posteriormente- descontar los flujos futuros al presente, normalmente el flujo de caja libre.

En el caso de las tecnológicas, dicho flujo de caja libre ha crecido de forma consistente y rápida en los últimos tiempos y los analistas, en sus modelos, han mantenido los ritmos de crecimiento en muchos casos. Se espera que generen resultados crecientes y elevados a lo largo del tiempo.

Teniendo en cuenta que a la hora de descontar el valor actual es mayor para los flujos más cercanos, si los tipos de interés de referencia suben, los analistas deberán ajustar al alza la tasa de descuento. Esto tiene como efecto inmediato que el valor actual de los flujos obtenidos más lejanos en el tiempo, será menor y, por tanto, bajará el valor estimado para la sociedad analizada.

2) Elevados niveles de valoración alcanzados

Otro de los motivos de preocupación entre los inversores, son los niveles de valoración alcanzados por muchas empresas del sector tecnológico a lo largo de 2020 y 2021, con el sector cotizando a unos múltiplos muy por encima de su media histórica.

Este segundo factor está íntimamente ligado con el anterior. Hasta noviembre del año pasado eran pocos los que cuestionaban, por ejemplo, el PER o el EV/EBITDA a los que cotizaban las tecnológicas, grandes o pequeñas, de primera fila o no. En general se encontraba justificación en base al crecimiento futuro de esas empresas. 

En el momento en el que la FED ha anunciado que sus políticas monetarias van a ser más restrictivas, los analistas han incorporado la nueva situación a sus modelos, han reducido sus previsiones y han comenzado a bajar valoraciones y, por tanto, precios objetivo.

Prácticamente todas las grandes tecnológicas han recibido revisiones a la baja (aunque salvo algunas excepciones, pequeños ajustes) y ya no se aprecia esa especie de 'fijaciones de precios objetivo corriendo', detrás de unos precios que no paraban de subir.

3) Endurecimiento regulatorio

El tercer factor, y no menos importante, que está afectando negativamente a la cotización de las empresas tecnológicas es el endurecimiento regulatorio que se está planteando contra ellas, tanto en China como en EE UU y en la Unión Europea, buscando aprobar leyes que limiten ciertas actividades y negocios especialmente de los grupos más grandes (Amazon, Alphabet, Meta Platforms y la tienda de aplicaciones de Apple).

Por ejemplo, la semana pasada, un grupo de trabajo de senadores norteamericanos dejo planteada una ley antimonopolio, que prohibiría a las mayores plataformas tecnológicas favorecer sus propios productos y servicios en detrimento de los de la competencia. Además, los legisladores modificaron el proyecto de ley incluyendo una nueva disposición diseñada para incluir las grandes plataformas tecnológicas de propiedad extranjera, con el objetivo puesto en alguna concreta como TikTok.

La denominada 'American Innovation and Choice Online Act' pasará ahora al pleno del Senado, después de que varios senadores declarasen querer incluir cambios adicionales antes de votar a favor de la medida. El proyecto de ley cuenta con apoyo bipartidista, aunque hay discrepancias también entre los políticos de ambos partidos mayoritarios. Sus detractores señalan que se trata de una ley dirigiendo a compañías muy concretas (las anteriormente citadas), pero que permite a otro grupo de empresas más pequeñas realizar esos mismos comportamientos que se están cuestionando para las grandes.

En nuestra opinión, el fuerte impulso realizado en la digitalización de la economía hace merecedor al sector tecnológico de una prima en su cotización respecto a sus valoraciones históricas; pero es verdad que esta prima podría ser excesivamente alta y ahora el contexto exige ser mucho más selectivo en un sector, que mantendrá unos niveles de crecimiento de resultados muy altos; pero que, a diferencia de lo que ocurría hace unos meses, no siempre se verán reflejados en las cotizaciones.

Antonio Castelo es estratega de iBroker

Noticias relacionadas

next