VALÈNCIA. El holding empresarial Rover, dedicado a las construcción de infraestructuras en diferentes sectores, aumentó en 2023 un 32,5% su facturación hasta alcanzar los 190 millones de euros frente a los 143,3 millones que ingresó en el ejercicio anterior. Un crecimiento que fue consecuencia del aumento en su cartera de pedidos y obras, que, no obstante, no se reflejó en su resultado consolidado, ya que el grupo ganó un 59,5% menos, hasta los 3,8 millones, como consecuencia del alza de costes, según consta en sus cuentas anuales depositadas en el Registro Mercantil.
Concretamente, la compañía que preside Alfredo Rodríguez señala, en el informe de gestión, que en 2023 "los costes del sector de la construcción se mantuvieron por encima de los que había antes de la covid y su evolución fue incierta". "Esto ha supuesto un fuerte impacto económico en las obras en curso en ese periodo", refleja para incidir en que en noviembre del pasado ejercicio, los precios de algunos materiales y de la energía estaban entre un 30 y un 40% por encima de los que había antes de la crisis sanitaria.
En este sentido, Rover remarca que "el sobrecoste medio acumulado en las obras en ejecución en los tres últimos años oscila entre un 12% y un 22%, alcanzándose máximos de hasta el 29% en ciertas tipologías de obras".
Un hecho que evidentemente ha repercutido en su resultado final. Y más teniendo en cuenta que su principal negocio son las infraestructuras, tanto obra civil como construcción residencial, pasando por el sector ferroviario y marítimo a través de diferentes divisiones. Por otro lado, su patrimonio neto ascendió hasta los 44,8 millones de euros, el 22,83 % sobre los activos totales, según consta en sus cuentas.
Además, el grupo empresarial cuenta con una fuerte presencia en el mercado internacional en países como Suecia, Colombia, Polonia y Uruguay, donde cuenta con sedes propias. Asimismo, tiene contratos y proyectos en marcha en Arabia y Argelia. De hecho, más del 40% de su negocio está en el mercado exterior, principalmente en Polonia y Uruguay. En cualquier caso, España es su principal destino, ya que copa el 59% de su cifra de negocio, es decir, 111,9 millones de los 190 millones de su facturación en 2023.
De cara al futuro, Rover no prevé "cambios sustanciales en la evolución del grupo" ni tampoco hay riesgos ni incertidumbres "que puedan modificar la previsión de continuidad".