Maria Josep Safont, alcaldesa de Borriana, en su despacho.BORRIANA. Las obras de derribo del IES Jaume I de Borriana arrancarán la próxima semana o bien a principios de marzo. Así lo ha asegurado este viernes la alcaldesa de la localidad, Maria Josep Safont, durante su comparecencia telemática ante diferentes medios de comunicación. Los alumnos ya fueron trasladados a las aulas prefabricadas situadas en el IES Llombai tras la Navidad.
Los trabajos, que fueron adjudicados a la empresa Acciona por 12,4 millones de euros, se prolongarán durante 30 meses. Primero se demolerá el antiguo aulario y posteriormente se construirá el nuevo instituto en dos bloques. La previsión de la Conselleria de Educación es que los alumnos puedan regresar al remozado centro para el inicio del curso escolar 2023-24.
La alcaldesa también ha ratificado el inicio “esta próxima semana” de los trabajos de conversión del antiguo ambulatorio de Burriana en las oficinas municipales de Servicios Sociales. En este caso, el contrato fue adjudicado a la empresa Urbamed Infraestructuras por 1.415.077 euros y un plazo de ejecución de 9 meses. “Se pidió la cesión del inmueble en 2012 y en noviembre de 2019 se firmó pero por menos metros cuadrados de lo previsto, por lo que la resolución de ese problema retrasó las obras”, ha recordado Safont.
El futuro centro albergará un área de atención especializada a familias, un gabinete jurídico para atender casos de desahucio y otros graves problemas relacionados con la vivienda, una unidad de atención a afectados por trastornos adictivos y cursos de formación laboral, entre otros servicios. De los 2.298 metros cuadrados del edificio, apenas 250 se destinarán al Centro de Atención e Información (CAISS) del Instituto Nacional de la Seguridad Social.
Por otro lado, Safont ha ratificado también que las obras del Centro de Atención Temprana (CAT) concluirán “en abril o mayo” tras resolverse el “problema en el techado” de la nave donde se ubicará. La contratación del personal será responsabilidad del consistorio pero sus nóminas irán a cargo de la Generalitat.
La primera edil borrianense ha admitido que la Unión Europea aún no ha pagado ni un solo euro de los 1,5 millones que adeuda a la localidad por el 50% del coste de las obras con cargo a los Fondos Feder. “Hemos hecho tres requerimientos pero están en la fase de revisión de documentos y no tenemos constancia de que esas ayudas vayan a ser inmediatas”, ha admitido.
En otro orden de cosas, Safont ha confirmado la adjudicación del proyecto de construcción de un pozo de agua potable en la pedanía de Santa Bárbara, así como la adecuación de una zona de tierra en la avenida Jaime Chicharro. “Era una reivindicación de los vecinos, y ahora debemos desbrozar y colocar una capa de zahorra y hormigón en la zona”, ha añadido.
También se va a mejorar el saneamiento en la calle Ribesalbes para reconducir el agua de lluvia al colector central y paliar así las inundaciones que se producen cada vez que llueve de forma copiosa. Por último, según Safont, se instalará en breve una farola en el aparcamiento del camino Artana “para mejorar la seguridad” y se iniciará la próxima semana las obras de mejora de los imbornales y la iluminación en un tramo de la avenida Constitución.
La alcaldesa también ha desvelado contactos con el Obispado para resolver la existencia de un agujero en la cubierta del campanario de Burriana. “Se está haciendo una valoración para ver qué solución tiene ese grave problema ya que se deberán hacer obras importantes”, ha admitido.
Por último, respecto al Plan Resistir, la munícipe socialista ha apuntado que este jueves firmó las bases para que los autónomos puedan solicitar las ayudas y hoy se reúne con las gestorías de Burriana para darles toda la información.
