CASTELLÓ. El alcalde de Sant Jordi, Iván Sánchez Cifre, ha decidido que el Ayuntamiento se implique directamente para reforzar la vigilancia y la seguridad por la "oleada" de robos de las últimas semanas y ante la "inacción" de la Subdelegación del Gobierno en Castellón.
Según ha explicado el consistorio en un comunicado, la subdelegada no ha querido realizar una reunión con los municipios perjudicados "a pesar de las peticiones que le han trasladado tanto el alcalde de Sant Jordi como de los de otros municipios vecinos para que haga una reunión y así tratar el problema y poner los medios para combatirlo".
Iván Sánchez Cifre ha decidido realizar unas declaraciones delante de la Subdelegación del Gobierno para quejarse de que pese a la "oleada" de robos que están sufriendo tanto en Sant Jordi como en otros municipios vecinos, siguen sin respuesta a su petición de una reunión para atajar un problema "que preocupa mucho".
"Por eso pido a la subdelegada del Gobierno que asuma sus responsabilidades en materia de seguridad ciudadana, porque son muchas las vecinas y vecinos los que han venido a quejarse porque se sienten inseguros en sus propias casas. Por eso le exigimos a Antonia García Valls que haga la reunión que le hemos solicitado en varias ocasiones los pueblos de la comarca del Baix Maestrat y que además implemente con más efectivos la Comandancia de la Guardia Civil de Vinaròs y así acabar con esta oleada de robos", ha dicho.
Iván Sánchez Cifre ha explicado que "el Ayuntamiento de Sant Jordi, pese a no tener competencias en materia de seguridad, ya está trabajando para frenar esta oleada de robos". Y es que, ante esta situación, el Ayuntamiento ya está actuando con el aumento de efectivos de la vigilancia nocturna y la instalación de más cámaras de seguridad.
El Ayuntamiento de Sant Jordi mantiene desde hace algunos años una importante actividad de vigilancia y control en todos los campos y huertos del municipio para evitar los robos, especialmente en época de cosecha. Por eso, ya dispone de un operativo de seguridad por tierra y aire, al haber incorporado ya a estas labores un dron para detectar movimientos sospechosos, que se coordina con el trabajo del guardia municipal.
Hace ya dos años el Ayuntamiento de Sant Jordi reforzó las medidas de seguridad para tratar de evitar los robos de algarrobas que tradicionalmente se producen en toda la comarca cuando llega la temporada de recolección. El alcalde del municipio encargó que se especializase al guardia rural del pueblo en videovigilancia aérea y se comprase un dron para mejorar las tareas vigilancia en todo el término municipal.
Iván Sánchez Cifre ha asegurado que la seguridad es algo "fundamental" para garantizar la calidad de vida en cualquier pueblo y rentabilizar las explotaciones agrícolas de los vecinos. Además, ha lamentado que en Sant Jordi están en "desventaja" porque suelen tener explotaciones agrícolas "muy diseminadas y con las fuerzas de seguridad a más distancia que en las poblaciones costeras".