VALÈNCIA. Suiza se ha alzado con el micrófono de cristal con un total de 591 puntos en Eurovisión 2024, en un año en el que el festival ha estado marcado por las protestas contra Israel. Este año el festival de la canción se ha celebrado en Malmö, Suecia y coincidía con el 50 aniversario de la victoria de Abba con Waterloo en el año 1974. Quedaba en segundo lugar Croacia con 547 puntos y le seguían Francia y Ucrania. España se quedó con 30 puntos en la posición 22º quedando, por debajo de Blanca Paloma que quedó en el puesto 17 en Eurovisión 2023.
La gala estuvo marcada por la polémica de la participación de Israel en el concurso de la canción por coincidir con las acciones del ejército israelí en Gaza. Diversas manifestaciones pedían la retirada del país de Eurovisión este año y hasta se tomaron medidas desde la UER (la Unión Europea de Radiodifusión) al incluir un sistema de aplausos pregrabados para evitar que se escucharan los abucheos en la actuación en directo, aunque terminaron colándose algunos en la retransmisión final.
Esta 68º edición del festival estuvo marcada también por los "pitidos" hacia el productor de Eurovisión, el sueco Martin Österdalh y para Israel en el momento del televoto, en el que recibieron 323 puntos colocándoles como ganadores por un breve lapso de tiempo, los 12 puntos de España en el televoto fueron para ellos. En el televoto España contó tan solo con 11 puntos y Reino Unido con 0 puntos. La gala estuvo rodeada de polémicas, como la primera descalificación de la historia del certamen, la de Países Bajos por unas "presuntas amenazas" por parte de su representante, Joost Klein, a una trabajadora de la producción del certamen en la semifinal del jueves.
A lo largo de la tarde previa a la celebración del certamen varias delegaciones se mostraron también molestas por la participación de Israel en Eurovisión y también se acusó a su delegación de "acosar a otros artistas dentro del centro de prensa", como medida cautelar la UER separó a Israel del resto de delegaciones en los camerinos. El festival también vetó la entrada de la bandera de la Unión Europea en el recinto, algo que fue criticado por un responsable del Partido de la Alianza de los Liberales y Demócratas por Europa (ALDE), el moldavo Dorin Frasineanu: "Nos acaban de negar la entrada a Eurovisión con la bandera de la UE. Nos han dicho que es "política" y que "no se permite". ¿Cómo puede la Unión Europea de Radiodifusión prohibir la bandera de la UE en el mayor evento de Europa?", planteó Frasineanu en sus redes.
Arrancando por el pase de "banderas" se notó la ausencia del representante neerlandés: Joost Klein y destacó Nemo, el ganador y representante de Suiza saliendo con una bandera de género no binario. Desde RTVE apenas se comentó la salida de Israel, que fue tapada por aplausos pregrabados. Al final fueron 25 los países que participaron en Eurovisión 2024 y la gala fue acompañada por los comentarios de la humorista y presentadora sueca Petra Mede quien ha presentado la gala hasta tres veces y que presentó la gala citando a España con su grito “a los cuatro vientos” de Nebulossa y Zorra. España será también escenario Eurovisivo el próximo mes de noviembre, ya que Madrid acoge el certamen de Eurovisión Junior 2024.
Hacia el final de la gala, en el momento de las votaciones y nada más entrar en la green room Petra se acercó a Nebulossa para pedir una “postal” propia como las de presentaciones de los demás participantes. Resultó llamativo el acercamiento de la presentadora a los españoles tanto mencionando las frases míticas de Zorra como hablando en español al comienzo de la gala. España fue uno de los países que también se unió a votar con 12 puntos a Suiza y su propuesta The Code por parte de Nemo. Como novedad este año se podía votar desde antes de comenzar la gala.
Inauguró la gala el país anfitrión: Suecia, ganadora hasta siete veces de este festival y que participó este año con los gemelos Marcus y Martinus con su tema Unforgettable con toques pop y synth en el que hicieron bailar a 9000 personas del estadio de Malmö. Les siguió Ucrania con su tema Teresa y María de Alyona & Alyona y Jerry Heil un tema con el que hablaban sobre un renacer religioso y con el que inundaron el escenario de un océano artificial y acompañado de un rap que rompía con el escenario eclesiástico del inicio. Tras esta actuación llegaba Alemania, en el puesto número tres, que presentaba a Isaac con su tema Always on the run con una puesta en escena con estructuras metálicas rodeadas de fuego simulando "un hogar en llamas".
Le siguió Luxemburgo que llevaba 31 años sin participar en el festival, con Fighter de Tali, un tema sobre cómo hacerse un hueco en la industria musical y que mezclaba francés e inglés en una puesta en escena marcada por los neones y las animaciones que traspasaron las pantallas de los telespectadores. En la retransmisión del festival desde RTVE presentaron a Israel explicando que su participación en el festival “estaba siendo muy cuestionada por el conflicto armado que se está viviendo en este momento”, sin comentarios sobre su propuesta desde Televisión Española remarcaron que Eurovisión se presenta como un festival “sin tintes políticos”.
Tras esta escueta presentación llegó la actuación de Eden Golan con su tema Hurricane, que arrancó ya con muchos abucheos que se oían a lo largo de la actuación entre los aplausos pregrabados. Al terminar la actuación desde RTVE resaltaron que en escenario “se oían tanto silbidos y pitidos como aplausos”. Justo antes de la celebración del festival la ganadora de la anterior edición, Loreen, declaró que no entregaría el micrófono de cristal a Eden si ganaba el primer premio, rompiendo de esta manera el protocolo.
A la actuación de Israel le siguió la de Lituania que llegaba justo antes de España con Silvester Belt con Luktelk, un tema marcado por ritmos electrónicos y una puesta en escena con bailarines que con juegos de manos parecían hacer de sombra al cantante. En el puesto número ocho, y tras una breve pausa de publicidad, llegó el momento de Nebulossa que fue presentada por Petra celebrando su éxito a través del festival de la canción: “El año pasado daban un concierto en un pueblo de España donde no había casi amigos y este año están aquí representando a España”, o “mis amigos de España” como señalaba la presentadora entre risas.
En la “postal” de Nebulossa con el Nou Mestalla como telón de fondo se presentaba la banda valenciana compuesta por Mery Bas y Mark Dasousa, con su tema Zorra que cuenta con producción totalmente valenciana y que con su letra relata la historia de superación de una mujer por ser quien es a pesar de las críticas. Mery se subió al escenario vestida con un traje en homenaje a Abba aplaudida por el público de Malmö quienes corearon a todo pulmón:“Soy más zorra todavía” inscrita en la pantalla trasera de Mery al cantar la estrofa.
Sin duda la actuación del dúo valenciano Nebulossa fue una de las actuacios más animadas de la noche. Hicieron gritan a los Eurofans “zorra, zorra, zorra” hasta cuando no salía en las pantallas. Al terminar la actuación los comentaristas de RTVE coincidieron que todo Malmö cantó el tema a todo volumen. A España le seguía Estonia con el tema (nendest) narkootikumidest ei tea me (küll) midagi, el título más largo hasta de la historia de Eurovisión -con 51 caracteres- por parte de la banda 5MIINUST x Puuluup.
En su actuación simulaban una especie de guerra entre los seis integrantes del escenario jugando con diferentes voces y sin mucha entonación. El tema abordaba cómo superar la adicción a las drogas a un ritmo estilo “polka”. Le seguía Irlanda en el puesto número 10 con una puesta en escena única liderada por el ilicitano Sergio Jaén y con la escalofriante actuación de Bambie Thug con su tema Doomsday Blue que parecía un ritual satánico y con un bailarín que parecía emular al propio diablo. Al retirar su corpiño Bambi Thug desvelaba un traje con los colores de la bandera trans, en lo que parecía una liberación del personaje.
Letonia llegó con el tema de Dons, quien encorsetado en un corpiño de cuero azul y con una mirada penetrante a cámara interpretaba Hollow, un tema que cantaba dentro de un gran círculo naranja frente a una pantalla en la que parecía caerse a un agujero negro mientras avanzaba en su actuación. Le siguió Grecia con con Marina Satti y su tema Zari, que comenzaba con unos planos al más puro estilo Tik Tok, sin duda la cantante consiguió animar al público que coreaba con ella en griego sus chillidos. Tras ella vino Reino Unido con la actuación de Olly Alexander y su tema Dizzy con una puesta en escena dentro de un cubo que se movía al ritmo de la canción y que iba girando según se movía Olly. Sin duda fue una de las actuaciones más psicodélicas siguiendo el ritmo de la actuación de Bambie Thug.
En el puesto número 14 llegó Noruega con Gåte, país que mantiene el récord de terminar en última posición en anteriores ediciones, se subieron al escenario de Malmö con su tema Ulveham, un tema que relata un cuento tradicional y que mezclaba rock y folk en una puesta en escena muy vikinga y oscura. Le siguió con una propuesta más animada Italia con su tema La Noia de Angelina Mango, con una puesta en escena con fuegos y rodeando a la cantante de rosales, con cinco bailarinas que se movían al estilo vogue.
Ramonda fue la canción con la que Teya Dora representaba a Serbia con una letra que compuso para superar la muerte de su padre haciendo alusión a una flor que “nunca se marchita”. Animando un poco el panorama llegaba Finlandia al más puro estilo techno con No Rules! de parte del grupo Windows 95man con una puesta en escena en la que el protagonista se presentaba “desnudo” sobre el escenario en la que constantemente le tapaban para que “no se le viera nada” con todo tipo de espontáneos arriba y abajo del escenario. Sin duda una de las actuaciones más atrevidas y divertidas de la noche.
Le seguía el país vecino, Portugal con Iolanda y su Grito, con una actuación sobria entre blanco y negro en la que los bailarines sin cara bailaban alrededor de la cantante. Armenia participó con Jako de Ladaniva, subiéndose al escenario de Malmö entre trompetas y bandurrias y con una actuación muy enérgica con fondos estampados y trajes regionales. En el puesto 20 llegó el turno de Chipre con la actuación de Silia Kapsis con Liar, una de las propuestas más “poperas” de la noche que iba acompañada de una actuación muy enérgica que hizo bailar a todo Malmö y en la que los bailarines acabaron descamisados... ¿No se supone que no podían verse desnudos en el certamen?
Suiza, gran ganadora de la noche, llegó con la actuación de Nemo, con su The Code una canción en clave queer en la que Nemo cantaba sobre cómo rompe el “código” con su estética y su forma de ser, hablando de su no-binarismo a través de la letra. El tema recibió muchos aplausos por parte del público y en la puesta en escena se mostraba sobre una esfera rotatoria sobre la que bailaba. Su enérgica actuación y su solo le llevaron a obtener los 12 puntos por parte de la gran mayoría de miembros del jurado, dotando a Nemo del micrófono de cristal al final de la gala.
Luego fue el turno de Raiven representando a Eslovenia con el tema Veronika con una puesta en escena en la que el escenario se convertía en agua y Raven se mostraba en un corpiño transparente para contar la historia de la bruja con este mismo nombre. Baby Lasagna es el nombre artístico tras el que se escondía Marco para representar a Croacia con el tema metalero Rim Tim Tagi Dim en que parecía que los trajes regionales entre tanto fuego. La actuación, siguiendo con la de Zorra, fue una de las más coreadas de la noche, y era una de las favoritas para ganar Eurovisión lo que habría supuesto la primera victoria para Croacia como país independiente.
Georgia, clasificada por primera vez desde 2016, se subió al escenario con su propuesta Firefighter de Nutsa Buzaladze, con una actuación en la que el fuego era tan protagonista como la cantante que se rodeaba de colores cálidos y humo para representar a su país. En penúltimo lugar llegó Slimane para representar a Francia con la balada Mon amour, aunque ya había tardado en aparecer este género… Con un juego de cámaras y sobre fondo blanco Slimane defendió su balada en la que reinaba el silencio en el Malmö, y mejor porque el cantante se atrevió con un solo alejado del micrófono para mostrar su capacidad vocal, un atrevimiento que fue aplaudido por el público sueco. Kaleen llegó en el puesto 26 -y final. con su tema We will rave de Kaleen, una canción enérgica marcada por ritmos “raveros” como su nombre indica para representar a Austria. Con una actuación no apta para epilépticos y un traje metálico que deslumbraba a todo el público la cantante supo cerrar las actuaciones del festival por todo lo alto.
La gala concluyó con una actuación en conexión con Londres en la que se mostraban unos componentes de Abba "eternamente jóvenes y en versión holograma" en la que conectaban con Eurovisión a través de un concierto hecho con Inteligencia Artificial para representar Waterloo de nuevo en la actualidad. Si subieron al escenario Charlotte Perrelli, Carola y Conchita Wurst para cantar el tema en directo desde Malmö con imágenes originales de la actuación de Abba como telón de fondo. Aunque España quedó en el puesto 22 sobre el escenario la puesta en escena de Zorra fue una de las más celebradas de la noche, demostrando que Nebulossa ha conseguido dejar una buena imagen de una "zorra de postal" y que son capaces de hacer bailar a Malmö entero a pesar de su posición, consiguiendo que toda Europa cante a favor de las "zorras".