CASTELLÓ. El Castellón no ha cerrado su capítulo de fichajes pese a haber incorporado diez caras nuevas en su plantilla tras el ascenso logrado hace un mes y medio, en Málaga.
Y es que el club albinegro sigue trabajando en diversos frentes para dotar al primer equipo de los argumentos necesarios para ser competitivo en Segunda División.
Así, el técnico orellut, Óscar Cano, ha reconocido que sus objetivos se centran en un delantero y un centrocampista de perfiles complementarios a los que tiene en su plantilla. Con estos jugadores, el equipo de la Plana daría por buena la lista de altas, aunque no descartaría más novedades si el mercado ofreciera oportunidades que mejoraran lo que hay y que fueran asequibles económicamente. No serían, de todas formas, necesidades prioritarias.
En el caso de atacante, su llegada provocaría un excedente importante en esa línea. Actualmente, el entrenador del Castellón dispone de César Díaz, Juanto Ortuño, Jordi Sanchez, David Cubillas, Josh Pérez y Jairo Cárcaba para ejercer esa función. Con un nuevo refuerzo, la cifra de delanteros se elevaría a siete, por lo que tendrían que salir tres.
Mientras tanto, el centro del campo es la zona en la que ha registrado más novedades el Castellón en este mercado después de los fichajes de Jesús Carrillo, Marc Mateu, Josep Señé, Álvaro Fidalgo, Gus Ledes y Paolo Fernandes. Esto supone más de la mitad de las incorporaciones realizadas por el conjunto albinegro este verano.
El club no tiene prisa en sumar los nuevos efectivos, ya que falta un mes para el cierre del mercado. Además, el técnico albinegro dispone del grueso de refuerzos que tenía previstos, por lo que su plantilla está perfilada a falta de esos retoques.
Lo que sí necesita acelerar es el capítulo de salidas, ya que ahora mismo hay 29 jugadores en la plantilla y la Liga permite un máximo de 25 inscritos. Con la llegada de dos futbolistas más, el Castellón necesitaría tramitar seis bajas.