VILA-REAL. Capítulo negro en la historia del Villarreal: Unionistas de Salamanca terminó llevándose el gato al agua en una eliminatoria de dieciseisavos de Copa del Rey que quedará en el recuerdo. Tras finalizar los noventa minutos con 1-1 en el marcador, la iluminación del Reina Sofía comenzó a fallar y el colegiado Busquets Ferrer decidió que no se podía seguir jugando en esas condiciones.
El encuentro se reanudó a plena luz del día en la tarde del día siguiente, cuando la tanda de penaltis decretó que fuera el conjunto local el que accediera, de manera sorpresiva, a la siguiente ronda. Kiko Femenía mandó su lanzamiento a las nubes y los locales, futbolistas y afición, enloquecieron para celebrar la gesta conseguida.
Al Submarino le costó mucho entrar en el partido, realizando un primer tiempo bastante tímido en el que no pudo crear peligro. Con el paso de los minutos el cansancio fue haciendo mella en los futbolistas de Unionistas, hasta que Ilias Akhomach desequilibró la balanza con un zurdazo directo a la escuadra.
Sin embargo, los locales consiguieron igualar desde los once metros a falta de tres minutos gracias a que Busquets Ferrer señaló un más que discutible penalti de Comesaña que Alfred Planas supo transformar. Tras el pitido final, que indicaba el paso a la prórroga, llegó el lío de la iluminación.
Los focos del estadio Municipal Reina Sofía comenzaron a fallar y, ante la falta de garantías para jugar con la iluminación adecuada, el árbitro balear decidió que no se podía continuar jugando. La prórroga se jugó en la tarde del día siguiente, terminando sin goles y desembocando en una tanda de penaltis que eliminó al Villarreal de la competición copera.
El Villarreal arrancó dominando el encuentro y antes de los diez minutos Ilias Akomach reclamó un penalti del portero de Unionistas, pero Busquets Ferrer no estuvo por la labor. El conjunto local respondió con una gran jugada de estrategia que, de no ser por la buena intervención de Pepe Reina, habría terminado en gol.
Como no podía ser de otra forma, el Submarino se mostró superior a un conjunto de dos divisiones por debajo, pero los castellanoleoneses no renunciaron a tener el balón e incluso gozaron de protagonismo ofensivo llegando al área amarilla en varias ocasiones.
Los de Marcelino no pudieron sentirse cómodos en todo el primer tiempo, en el que tampoco lograron crear peligro claro sobre la meta contraria. El Municipal Reina Sofía, lleno hasta la bandera, veía como los suyos lo estaban dando todo y, hasta el momento, conseguían mantener a raya a todo un campeón de Europa.
En el segundo tiempo el Submarino ganó en control de balón y metió a Unionistas en su propio campo, pero no conseguía tener precisión para acertar en el último pase. Los dos centrocampistas del conjunto local, Héctor Nespral y Javi Villar, fueron los encargados de desmantelar muchas de las jugadas de los groguets.
Sobre la hora de partido llegó la jugada más polémica del partido. Ekaitz Jiménez cayó en el área pidiendo penalti de Dani Parejo y justo después el balón le cayó a Losada, que marcó desde la frontal del área. Sin embargo, el gol no subió al marcador porque el colegiado balear mostró cartulina amarilla a Ekaitz por simular.
Poco después se tuvo que retirar lesionado Eric Bailly, obligando a Santi Comesaña a colocarse como central unos minutos hasta la entrada de Leković. Coquelin y Terrats entraron para refrescar el centro del campo, así como Sørloth en la delantera en el lugar de Morales.
Con la entrada de los hombres de refresco el cuadro de la Plana Baixa se volcó aún más en ataque, aprovechando el cansancio de los salamantinos. Ilias Akhomach fue el único capaz de desequilibrar la balanza: el ex del Barça dibujó una parábola perfecta con su pierna izquierda que terminó en la escuadra.
Sin embargo, la alegría le duró poco a los de Marcelino. Busquets Ferrer señaló un penalti muy discutible por empujón de Comesaña y el recién ingresado Alfred Planas lo convirtió para desatar la euforia en el Reina Sofía. En el minuto 87, el marcador volvió a equilibrarse y el partido se encaminó hacia la prórroga.
Tras todo el mencionado lío de la iluminación del campo, el encuentro se reanudó a plena luz del día en la tarde del lunes. Con las gradas a reventar (Unionistas dejó entrar gratis a sus aficionados) el conjunto local salió muy motivado a apretar al Submarino. Entre eso y el estado del césped, a los de Marcelino les fue imposible desarrollar su juego en ningún momento.
Terrats fue el protagonista del primer tiempo de la prórroga, primero disparando al palo en un saque de falta y después viendo cartulina por encararse con el central valenciano Carlos Giménez. Los futbolistas de Marcelino no consiguieron dominar el encuentro y recibieron muchas llegadas al área.
En una de ellas, ya en el segundo tiempo de la prórroga, tuvo que sacar el balón bajo la línea Leković para evitar el 2-1 de Erik Ruiz. El serbio lo celebró como un gol y poco después tuvo en un remate muy bombeado lo más similar a una ocasión por parte de los amarillos.
En la tanda de penaltis, Alberto Moreno falló el segundo lanzamiento de los groguets, pero después apareció Pepe Reina para detener el disparo de Alfred Planas. El portero madrileño también estuvo muy cerca de detener el disparo de Carlos Jiménez, pero no lo hizo y el que acabó fallando fue Kiko Femenía para sentenciar al Submarino.
Ficha técnica
1 (7)- Unionistas: Iván Martínez; Camus (Erik Ruiz, min. 46), Ramiro, Jiménez; Nespral (Jordi Tur, min. 119), Villar, Álvaro Gómez, Juan Serrano (Teijeira, min. 59); Slavy (Rastrojo, min. 59) (Ramírez, min. 119) y Losada (Planas, min. 85).
1 (6)- Villarreal: Reina; Altimira (Kiko Femenía, min. 106), Bailly (Coquelin, min. 69), Cuenca, Alberto Moreno; Ilias (Alberto Moreno, min. 111), Parejo, Comesaña, Baena (Terrats, min. 69); Morales (Sørloth, min. 69) y Gerard. En la reanudación del partido Trigueros entró en el lugar de Alberto Moreno.
Goles: 0-1, min. 82: Ilias. 1-1, min. 87: Planas (p).
Árbitro: Mateo Busquets Ferrer (Comité balear). Amonestó a Camus y Ekaitz Jiménez por Unionistas y a Parejo, Cuenca, Sørloth, Terrats y Coquelin por el Villarreal.
Incidencias: partido correspondiente a los dieciseisavos de final de la Copa del Rey disputado en el Estadio Municipal Reina Sofía ante 5.710 espectadores.