VILA-REAL. El pleno del Ayuntamiento de Vila-real ha dado este lunes vía libre al presupuesto de 2024, unas cuentas con la que puede activar convenios y nuevas inversiones. Dos de los proyectos más avanzados para activar sus obras son la nueva oficina de atención ciudadana y una nueva reforma del Gran Casino y Teatro Tagoba.
La primera inversión tiene un presupuesto de 117.927 euros y supondrá la adecuación del Forn d'Avall para centralizar en este espacio el servicio de atención y trámites a la ciudadanía. El proyecto ya está redactado y preparado para su licitación. También se prevé comenzar en breve otra fase de la rehabilitación del Gran Casino, con un coste de 124.656 euros.
Asimismo, según fuentes municipales, se completará la asignación que les corresponde al Ayuntamiento por la reforma de los antiguos juzgados, una obra incluida en la mejora del Mercat que cuenta con financiación de los fondos europeos de Next Generation.
Otras actuaciones incluidas en el presupuesto de 2024 y que se quieren activar en los cuatro meses de año que quedan son la rehabilitación del entorno de la Torre Motxa, con 148.000 euros; la conservación de la Alqueria del Carme, con 227.000 euros; la estabilización del Convento Espai d'Art, con 421.000 euros; y la prolongación de las calles Serra d'Irta e Isabel de Villena, con 100.000 euros.
La sesión plenaria ha ratificado el presupuesto de 2024 y la plantilla presupuestaria con la desestimación de las alegaciones presentadas durante el periodo de exposición pública. Las cuentas entrarán en vigor este martes una vez se publiquen en el Boletín Oficial de la Provincia. El alcalde, José Benlloch, ha detallado que tres de las alegaciones, presentadas por sindicatos, hacen referencia a la plantilla presupuestaria, mientras que la cuarta alegación al presupuesto ha sido presentada por una familia afectada por la ocupación directa de solares para abrir la avenida Francia por parte del anterior gobierno del PP.
Una vez estudiadas las alegaciones y vistos los informes técnicos, el alcalde ha propuesto su rechazo de las cuatro alegaciones para “aprobar definitivamente el presupuesto, seguir avanzando y entrar en la normalidad de gestión del municipio”. Tanto la plantilla presupuestaria como el presupuesto se han aprobado definitivamente con los votos a favor de PSPV, Compromís y el concejal Manuel Rubert, mientras que PP y Vox han votado en contra.
Las cuentas para este año, por importe de 58,3 millones de euros -un 4,8% más que el inicial del año pasado-, son “unos presupuestos sociales, económicos y responsables; unos presupuestos que nos permitirán acabar el año y asentar los cimientos de 2025 para que Vila-real siga avanzando", tal y como aseguró en su día la concejala de Hacienda, Sabina Escrig.
