10N: el PSOE pierde tres distritos y Vox se convierte en segunda fuerza en otros tres, entre ellos el Grau

CASTELLÓ. El día después de unas elecciones abre un periodo de reflexión entre los distintos partidos concurrentes. Se trata de analizar los resultados. De congratularse por los éxitos y de hacer autocrítica por los fracasos. De examinar al detalle los datos. De verificar que el mensaje ha calado entre el electorado y en aquellos barrios donde no lo ha hecho de averiguar las causas, que en ocasiones no son más que un indicador de lo que se avecina (cambios). En otras, simplemente responden al empuje de la moda nacional.

El 10N dibuja un mapa político en Castelló ostensiblemente diferente al que diseñó el 28A y confirmó poco después el 26M. En las dos últimas convocatorias el PSPV-PSOE se había convertido en la principal opción de los castellonenses. Así lo constaban las sufragios desgranados por distritos. La victoria socialista se repetía en ocho de los 9 sectores. El PP únicamente conservaba la zona centro, su feudo más tradicional. El color rojo tenía la práctica totalidad de la ciudad. Al menos, hasta el domingo.

Descomponiendo los resultados por mesas y distritos, se aprecian variaciones significativas respecto a convocatorias plebiscitarias precedentes. El PSPV pierde tres distritos en favor del Partido Popular, mientras que Vox se destapa como la segunda alternativa preferida de los ciudadanos en otros tres.

Según los datos que arroja el 10N, los socialistas mantienen su supremacía en el distrito 4, comprendido entre el Peri 18, calle Herrero y PAU Censal; en el 5, desde el centro hasta la periferia del sudoeste (San Lorenzo), por ejemplo; en el 6, San Miguel y avenidas Valencia y Vila-real; en el 8, Els Mestrets, Joaquín Costa y UJI; y en el 9, el Grau de Castelló.

Los populares, además de reforzar su hegemonía en el distrito 1 (centro), recuperan el 2 (parte del centro hasta el norte del 1), el 3 (accesos a la ciudad desde el este hasta las plazas María Agustina y La Paz) y el 7 (Rafalafena, Lledó y San Félix).

Avance de la extrema derecha

Otro dato llamativo corresponde al auge de la formación de extrema derecha que, casualmente, desbanca al PP como segunda opción en tres de los cinco distritos que controla el PSOE. Vox irrumpe con fuerza en el 6, 8 y 9, que abarca el Grau.

El hundimiento de Ciudadanos se observa en todos los barrios de Castelló, siendo ampliamente superado por Podemos, aunque ligeramente por encima de Compromís (Més Compromís), que es el partido que menos votantes arrastra en los 9 distritos de la ciudad. Incluso, en el 1 su presencia resulta testimonial con apenas 101 papeletas.

El crecimiento de Vox no solo le sitúa como la tercera fuerza política, sino que además apenas se coloca a 3.889 votos del Partido Popular, cuyo incremento en relación al 28A no pasa desapercibido, como tampoco la caída del PSPV en votantes.