VALÈNCIA. La reducción de plásticos de un solo uso es una de las batallas en la que numerosas compañías y ciudadanos se han propuesto combatir y, cada vez más, se adoptan medidas para minimizar su uso. Una de las industrias que genera estos residuos de forma continua es la del agua, a través del embotellado, a la que se suma la contaminación generada con los desplazamientos a los supermercados o a los hogares.
Esta es la situación que quiere solucionar Aguas Medita, una compañía dirigida por Javier Sebastián, Vicente Alcántara y Álvaro Castel e impulsada en el marco de Zubi Labs, proyecto desarrollado por el emprendedor valenciano Iker Marcaide para impulsar empresas con impacto social. Estos tres emprendedores proponen un sistema personalizado de filtración del agua que permita aprovechar el agua de red y generar una mínima huella medioambiental.
"Frente al problema del plástico, vimos que no tenía mucho sentido que llegando el agua de red hasta las casas estuviéramos moviéndola desde los Pirineos y generando huella de carbono a lo bestia", explica Virginia Sánchez, head of new ventures en Zubi Labs. "Se trataba de ponerle al cliente lo más fácil posible que consuma agua sin utilizar plástico".
Con este enfoque, Medita nace para ofrecer una alternativa al agua embotellada convencional a través de equipos de última tecnología en filtrado y dispensación que se conectan al agua de red de casas y hogares de un modo limpio y sin obras, obteniendo agua de baja mineralización. "Tenemos como clientes hoteles, oficinas, restaurantes, eventos u hogares", explica Castel, responsable de producto.
Su actual modelo les permite adaptar la tecnología a los gustos del consumidor, desde un agua menos filtrada a un agua con menos minerales. También adaptan la fórmula para obtenerla, desde una palanca alternativa en el grifo a una garrafa bajo la pila. "Depende del cliente tenemos un producto u otro. Existe una tecnología muy amplia", reconoce. "La tecnología permite darle un sabor determinado al agua. La clave es no colocar el mismo producto a todo el mundo".
Según explican, este sistema que ofrece agua de calidad es seis veces más sostenible que el agua embotellada en términos de emisiones de CO2. Aguas Medita instala ese sistema con tecnologías ya existentes en el mercado y permite acceder a este servicio a través de un pago por suscripción. No obstante, actualmente están desarrollando sus propios productos para satisfacer necesidades no cubiertas.
El servicio se presta a través de un pago por suscripción, que varía dependiendo de lo contratado y si está destinado a hogares, empresas u hostelería. Aguas Medita se presenta como alternativa a otros servicios de agua que van más allá de las botellas y las garrafas en el supermercado. "En el caso de jarras como Brita o similares, aunque es barata, el sabor no es adecuado. En otros sistemas como el agua por dispensador el plástico de las garrafas es muy difícil de reciclar", asegura Castel.
Actualmente tienen más de 100 clientes repartidos en su gran mayoría por la Comunitat Valenciana. "Queremos empezar a potenciar el servicio en el resto de España", señala Vicente Alcántara, responsable comercial y quien ya ha puesto en marcha compañías exitosas como San Hilari, una distribuidora de agua adquirida por Vichi Catalán. La compañía acompaña su kit de puesta en marcha con botellas metálicas que eviten el uso de vasos de plástico.