CASTELLÓ. El centro comercial Salera vuelve a abrir sus puertas el próximo día 1 de junio, tras haber alcanzado Castellón la fase 2 de la desescalada. De esta forma, sus establecimientos volverán a reactivar su actividad empresarial bajo un completo plan de medidas que garantizan la normalidad de su reapertura y la seguridad, tanto de sus empleados, como de sus visitantes.
Este plan de vuelta a la normalidad contempla medidas de carácter temporal, aplicables a la realidad de la situación y atendiendo a las directrices marcadas por las autoridades sanitarias en cada momento. Alejandro Galocha, gerente del Centro Comercial Salera afirma que: “Estamos deseando volver a abrir nuestras instalaciones y recibir de nuevo a nuestros clientes. Queremos transmitir un mensaje de positividad y tranquilidad tanto a todos los comerciantes que forman parte del centro como a los vistantes, hemos trabajado mucho para que la vuelta a esta ‘nueva’ normalidad sea segura para todos”.
De esta forma, y con el fin de que la actividad pueda desarrollarse en condiciones óptimas de seguridad, autoprotección y distancia social, el Centro controlarará el aforo, gracias a un sistema que proporciona en tiempo real el número de personas que se encuentran en el interior del centro comercial. Además, las puertas de acceso se limitarán, unas serán de salida y otras de entrada. En estas últimas, se colocarán alfombrillas desinfectantes para la limpieza del calzado antes de acceder a su interior.
Una vez dentro, todos los pasillos se habilitarán para ser utilizados en una sola dirección, con el fin de evitar cruces y aglomeraciones, pudiendo cambiar de pasillo y de dirección por sus intersecciones e instalando zonas de espera en las galerías, como medida de prevención. Adicionalmente, se distribuirá, por todos los pasillos, dispensadores de gel, así como señalética comunicando las normas en todos los puntos de acceso al Centro y en las zonas donde puede haber algún tipo de aglomeración, tales como escaleras, rampas de acceso o baños.
El resto de servicios que el Centro ofrecía al público tales como ludoteca, zona Tablet o parques infantiles, entre otros, permanecerán cerrados o limitarán su aforo, como es el caso de la sala de lactancia, en la que solo podrá entrar una persona, procediendo a su limpieza y desinfección después de cada uso. Lo mismo ocurre con los baños, en el que además se procederá a sustituir elementos de contacto, como el secamanos, colocando en su lugar papel, y a alternar el funcionamiento de otros elementos para cumplir con la distancia social establecida, como los grifos. A su vez, el Centro ha reforzado el personal de limpieza en los baños en el turno nocturno, desinfectándolo con ozono.
Con respecto a la entrega de compras o comida preparada, Salera ha habilitado una zona de recogida de compras en el parking subterráneo y un espacio reservado para el servicio delivery de sus establecimientos de restauración en la entrada principal del edificio.
Todas estas medidas serán supervisadas por los Hospitality agents, contratados y formados específicamente para velar por la seguridad y el cumplimiento de las normas de todos los visitantes del Centro, entre ellas la necesidad del uso de mascarillas en el interior de sus instalaciones, y asistirán al visitante con cualquier duda que tenga sobre cómo transitar por el centro comercial. Llevarán una camiseta para que puedan ser fácilmente identificados por los clientes.
Además, el Centro ha incrementado en un 42% su plantilla de seguridad y en un 25% el de limpieza. Adicionalmente, todo su personal recibirá una formación específica en materia de higiene, seguridad y atención al cliente, entre otras. Todo ello con el fin de poder restablecer la normalidad lo antes posible y que todos sus visitantes puedan volver a disfrutar de sus instalaciones, con la confianza y la seguridad que el centro les proporciona.