El Gobierno da un día de plazo a la industria azulejera para cerrar sus instalaciones

29/03/2020 - 

CASTELLÓ. El Gobierno da un día de plazo, este lunes 30 de marzo, a la industria azulejera para cerrar todas sus instalaciones, un anuncio que lanzó el pasado sábado. Rozando la medianoche de este domingo, el Ejecutivo estatal publicaba en el Boletín Oficial del Estado el Real Decreto-ley 10/2020 con el que regula la actividad económica en las próximas dos semanas, en las que el cese forzoso de todos aquellos sectores considerados "no esenciales" pretende servir de cortafuegos a la propagación del coronavirus. Con ello Moncloa resolvía el caos y la incertidumbre en la que había sumido al cluster azulejero, que durante todo el domingo se había lanzado a especular sobre la apertura o no de sus factorías. 

Así, la norma recoge textualmente: "En aquellos casos en los que resulte imposible interrumpir de modo inmediato la actividad, las personas trabajadoras incluidas en el ámbito subjetivo de este real decreto ley podrán prestar servicios el lunes 30 de marzo de 2020 con el único propósito de llevar a cabo las tareas imprescindibles para poder hacer efectivo el permiso retribuido recuperable sin perjudicar de manera irremediable o desproporcionada la reanudación de la actividad empresarial".

El predicado, recogido en la disposición transitoria primera, titulada Garantías para la reanudación de la actividad empresarial, parece incluido ex profeso para la principal industria castellonense, y llega después de que, durante la mañana del domingo, el president de la Generalitat, Ximo Puig, pidiese al del Gobierno, Pedro Sánchez, en la videoconferencia con el resto de comunidades, una "flexibilidad exigente" para el cierre de empresas porque hay "algunas industrias que no pueden parar de un día para otro", como sucede, "por ejemplo, con la industria cerámica", según afirmó en la rueda de prensa posterior.

Comunicación de Ascer

De hecho, según ha podido saber Castellón Plaza, esta es una petición que desde Ascer transmitieron a Puig en la noche del sábado, así como también a la subdelegada del Gobierno en Castellón, Soledad Ten. La principal demanda de la patronal azulejera iba dirigida, fundamentalmente, a cómo articular el apagado de los hornos cerámicos, algunos de los cuales (los refractarios) tardan días en perder el calor acumulado. Estos son los más viejos, mientras los más recientes, hechos con fibra de vidrio, se enfrían en unas horas. 

Esta problemática es incluso más acusada en los hornos de cocción de las fritas, cuyo proceso de apagado se puede prolongar hasta 3 o 4 días. A pesar de ello, y de lo que se había especulado durante todo el día, las esmalteras también deberán cesar su producción el martes. 

Cambio de planes

De ahí que la mayoría de las empresas integradas en Anffecc, la patronal de fritas, esmaltes y colorificios cerámicos, se vayan a ver obligadas a modificar sus intenciones. Y es que buena parte de ellas decidieron a lo largo del domingo acudir a sus centros de trabajo este lunes. Habían adoptado esta postura después de que varios borradores de la norma que regulará las dos semanas de paralización y los permisos retribuidos recogiesen que el subsector del vidrio, en el que las firmas consideran que se encuadran, estaba entre las actividades permitidas. Finalmente, esta rama económica ha desaparecido, junto a otras, del punto cuarto del anexo que recoge las excepciones al paro. 

Con ello, compañías como Esmalglass y Fritta, pertenecientes al mismo grupo, que han convocado este lunes a sus trabajadores para continuar con la producción -y que incluso, al menos en el caso de la segunda, habían planteado vacaciones forzosas para la mitad de la plantilla de administración y laboratorios durante las próximas dos semanas- tendrán que replantearse su actividad durante este lunes. 

Indefinición resuelta al límite

El día de transición, que no aparecía en los borradores previos y que fue publicado al borde de la medianoche, resuelve un día en que la indefinición del Gobierno sumió en el caos y la incertidumbre a la industria azulejera, que no sabía a qué norma acogerse para decidir si paralizaba, o no, sus factorías desde este lunes. De hecho, desde ninguna de las tres patronales que integran el cluster cerámico castellonense, Ascer, Anffecc y Asebec, quisieron valorar a este diario la situación. 

Esto se plasmó en una división entre sectores, y también entre las propias compañías de cada uno de ellos, a la hora de decidir qué hacer. Así las cosas, en la industria azulejera se habían dado posturas antagónicas. Como ejemplo, dos de los conglomerados más potentes. Por un lado, Grupo Pamesa decidió enviar al personal a las diferentes plantas y para ello este domingo la dirección redactó un escrito que distribuyó entre sus trabajadores para que estos lo mostrasen en el hipotético caso de que los hubieran parado las fuerzas del orden (una especie de salvoconducto, como los denominaron internamente). Por el contrario, Keraben, Saloni e Ibero, pertenecientes a Victoria PLC, ya transmitieron a sus empleados que no debían acudir ya este lunes a sus puestos de trabajo.

Por su parte, algunas empresas de maquinaria cerámica integradas en Asebec ya comenzaron este domingo a cesar su actividad. Eso sí, el día extra permite a estas, así como al resto, acometer el proceso de parada temporal con mayores garantías, algo a lo que procederán a lo largo del día de hoy.

Nervios

Tal fue la falta de información, que en todas las empresas estaban "muy nerviosos", señalaron fuentes del sector. Y es que no publicar la orden durante toda la tarde del domingo, después de que el Consejo de Ministros concluyese alrededor de las 14.00 horas, sumió en el desconcierto a los dirigentes cerámicos. Reuniones por videoconferencia y llamadas telefónicas marcaron la jornada, que quedó resuelta a punto de comenzar el día en que se inicia la paralización de todos los servicios no esenciales de la economía española. 

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