Foto: EPVALÈNCIA (EP). La Comunitat Valenciana ha recibido, por parte de la agencia de evaluación de riesgo Fitch Ratings, la calificación BBB- perspectiva estable por lo que respecta a su deuda a largo plazo, ha informado la Generalitat en un comunicado. La nota vendría a ser un aprobado raspado, a tan sólo un peldaño del "bono basura", y es la misma que mantiene desde hace años.
Esta calificación conlleva que la deuda de la Comunitat Valenciana, según la terminología usada por las agencias de calificación, tiene el grado de 'investment grade' o de 'inversión', y que la deuda emitida por la Generalitat puede ser utilizada por las entidades financieras como garantía ante el Banco Central Europeo.
La Calificación de BBB-, por definición, supone que se está calificando una deuda que tiene una capacidad "adecuada" para el pago de los intereses y del principal, que "puede debilitarse en mayor medida que las de calificaciones superiores ante cambios adversos en las circunstancias", han detallado desde el departamento de Hacienda.
Según destacan desde el área que dirige Vicent Soler, la agencia valora el soporte que el Gobierno central da a las comunidades autónomas, a través de los mecanismos de Fondo de Liquidez Autonómica, y de los diferentes mecanismos de control que el Estado tiene establecidos sobre las autorizaciones de endeudamiento, límites u obligación de información, lo que ha llevado a la Comunitat Valenciana a una gradual reducción del déficit.
Por otra parte, desde el gobierno valenciano han destacado que la agencia ha remarcado la "flexibilidad moderada" que tiene la Generalitat por lo que respecta a su capacidad fiscal para generar ingresos adicionales ante escenarios adversos de la economía, como ocurrió en la anterior crisis económica.
Fitch destaca que en un escenario conservador, los ingresos seguirán creciendo en los próximos cinco años a una tasa media del 3,5%. Además, señala el bajo coste de la deuda, en torno al 0,90%, y el reducido volumen de deuda a corto plazo.
En las actuales circunstancias, con un entorno de tipos bajos y teniendo en cuenta que un 83% de la deuda de la Generalitat es a tipo fijo, la previsión de la Conselleria de Hacienda es que los intereses de la deuda de la Generalitat no afectarán de forma relevante a los Presupuestos, y no van a impedir que se dediquen los recursos a las necesidades más importantes de Sanidad, Educación o servicios sociales.
