VALÈNCIA. La pandemia es global y también lo van a ser sus efectos. Con ese argumento, el presidente de la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV), ha instado al jefe del Consell, Ximo Puig, a poner en marcha en la Comunitat medidas complementarias a las que ha anunciado el Gobierno central este martes para combatir el daño económico de la crisis del coronavirus. El presidente de la CEV, Salvador Navarro, reclama que esas medidas "lleguen a todos y cada uno de los sectores y ramas productivas", no solamente a los directamente afectados por ese daño, como la industria turística o la hostelería.
La petición surge de un primer contacto entre Puig y los agentes sociales de la Comunitat para valorar el plan de choque del Ejecutivo central, que pretende movilizar alrededor de 200.000 millones de euros en recursos públicos y empresariales con medidas como créditos con aval público para garantizar la liquidez de empresas solventes, bonificaciones en cuotas de autónomos o flexibilidad para aplicar ERTE a las empresas más expuestas a esta crisis.
A falta de analizar en detalle el decreto del Gobierno central –algo que Puig y los presidentes de la CEV, UGT-PV y CCOO-PV harán este miércoles–, tanto el Consell como la patronal han realizado una primera valoración positiva de las medidas porque aborda uno de los problemas más graves desde la declaración del estado de alarma en España, la falta de liquidez de las empresas más golpeadas al tener que cesar repentinamente su actividad por completo y durante al menos dos semanas.
A juicio de la patronal de la Comunitat, la línea de avales pública para que las empresas no se queden sin liquidez, el Gobierno central aborda un asunto que por su magnitud "difícilmente podría haber sido cubierto por las comunidades autónomas". "Esperamos que esta medida sirva para preservar también el empleo", señala Navarro, quien espera que esta iniciativa sirva para que la falta de liquidez no se convierta en un problema de solvencia "y se trasforme en cierre de empresas", ha señalado Navarro.
Además, las medidas laborales anunciadas por Pedro Sánchez satisafacen en principio las peticiones tanto de los sindicatos como de la CEOE respecto de los ERTE de fuerza mayor y causas económicas y productivas, tanto en materia de reducción de plazos como de agilización del procedimiento.
Aún así, dada la "severidad de la crisis", la organización empresarial considera que la Generalitat debe reclamar al Gobierno central que éste y todas las demás administraciones públicas "renuncien a aumentar la presión fiscal durante, al menos, este ejercicio".
En este sentido, cabe recordar que el jefe del Consell ya anunció la pasada semana un primer paquete de medidas económicas y sanitarias contra la crisis como la creación de un fondo de capital riesgo a través del IVF dotado con 200 millones de euros para apoyar a grandes empresas de la Comunitat o el fraccionamiento, aplazamiento o bonificación del pago de los impuestos gestionados por la Agencia Tributaria Valenciana a empresas, profesionales y familias en dificultades por el coronavirus.
Por su parte, Puig considera que el decreto del Gobierno central supone un "gran esfuerzo para proteger y apoyar a familias, trabajadores, autónomos y empresas" al implicar "la mayor movilización de recursos económicos de la historia democrática de España".